Una película alcanza el calificativo de obra maestra cuando se convierte en una producción redonda, y su desenlace influye numerosas veces en este resultado. Películas cuyo final puede cautivarnos y dejarnos con buen sabor de boca, o al revés, una cinta prometedora arruinada por una resolución que no convence.
Los 7 mejores finales del cine

En este artículo, vamos a repasar aquellos mejores finales de películas que muchos de los lectores deberán evitar para no arruinarse con los spoilers, reteniendo el título como una propuesta que no defraudará.
#7 Casablanca
El final del famoso clásico de 1940 era tan sorprendente como mítico, convertido con el paso del tiempo en l a resolución más romántica de la historia del cine. Y es que cuando Rick ( Humphrey Bogart) dejaba escapar a Ilsa ( Ingrid Bergman) de la ciudad marroquí con un "siempre nos quedará París" para salvarla (a pesar de ser la esposa de uno de los líderes de la resistencia nazi), el cine romántico cambió para siempre.
#6 El Planeta de los Simios
Uno de los grandes clásicos del cine, estrenado en 1968, no sólo obedecía a una premisa aterradora, sino también a un final apoteósico (y cruelmente pesimista). La odisea del astronauta George Taylor ( Charlton Heston) en un viaje atemporal a lo largo de una Tierra dominada por primates culminaba con este y su compañera humana Nova a lomos de un caballo, a través de una playa que conducía hasta el último vestigio de la cultura humana: la Estatua de la Libertad neoyorquina semi sepultada en la arena. Pura distopía, emulada por Tim Burton en el posterior remake con menores resultados.
#5 Fight Club
Esta cinta de David Fincher fue estrenada en 1999, con escaso éxito de taquilla hasta convertirse con el tiempo en una cinta de culto, gracias en parte a su portentoso final. La trama narraba la nueva vida del Narrador (un Edward Norton consumista, fracasado y gris) tras un tipo carismático y transgresor, Tyler ( Brad Pitt), conformando una cinta extraña y mal vendida, cuyo desenlace no es más que una crítica al pensamiento consumista actual y al ego, un experimento existencial salpicado por las doctrinas de Nietzsche, en el que el Narrador seguía a la versión idealizada de sí mismo.
#4 Dancer in the Dark
El cine de Lars Von Trier siempre se ha nutrido de obras con finales apoteósicos. Tal es el caso de Dogville o de esta Dancer in the Dark, el debut de Björk en el cine como una mujer sobre la que llovían todas las desgracias imaginables: ser medio ciega, criar un hijo con el mismo porvenir, ser acusada de ladrona y condenada a morir en la soga. Lo que muchos críticos consideraron como pornografía emocional, obedecía a un final en el que la protagonista desfilaba hacia la muerte cantando, como hizo durante toda la cinta, convirtiendo el final en un proceso tan agónico como el destino de su protagonista.
#3 The Village
Si bien muchos lectores encontrarán mediocre esta cinta (fruto en parte de la equívoca campaña de promoción que tuvo allá por 2004), este autor encontró en The Village (El Bosque o La Aldea) uno de los mejores finales contemporáneos, el cual conseguía rescatar una película de intenciones dudosas. Y es que cuando una joven ciega parte desde un poblado del siglo XIX, atraviesa un bosque para buscar medicinas y salta una tapia hasta toparse con un jeep y por ende, con el siglo XXI, la cinta se convertía en otro ejemplo de la maestría narrativa de M. Night Shyamalan, siendo esta la cinta en la que empezó su particular declive creativo.
#2 El Curioso Caso de Benjamin Button
Estrenada en 2007, el tándem David Fincher - Brad Pitt volvía a deslumbrar con esta cinta basada en un relato de F. Scott Fitzgerald en el que un hombre nacía viejo para morir joven. Un final que muchos nos olíamos pero que a pesar de ello no pudimos evitar derramar alguna lágrima cuando una anciana Daisy ( Cate Blanchett) sujetaba al amor de su vida, Benjamin (Pitt) ,entre sus brazos, convertido en un retoño en plena víspera del fatídico huracán Katrina.
#1 Black Swan
El siempre inquietante Darren Aronofsky nos ofrecía en 2010 su propia visión de El Lago de los Cisnes. El famoso ballet era interpretado por Nina ( Natalie Portman) como el cisne blanco y Lily ( Mila Kunis) como el cisne negro; una metáfora en la que el personaje de Portman terminaba volviéndose loca, salvaje y psicópata, trasladando su particular reto profesional al mundo real, con la poética consecuencia de un suicidio en plena representación concebido como la culminación de un trabajo bien hecho. Al menos sirvió para que Portman se alzase con un merecido Oscar.
Son muchos los finales de películas que, de un modo u otro, han calado de diferente manera según el espectador, otros incomprendidos o algunos que se han convertido en universalmente magistrales. Espero que no os hayáis dejado deslumbrar por los spoilers y tengáis en cuenta algunos de estos títulos para deleitaros con la inagotable magia del cine, si bien algunos finales pueden ser imaginables pero tan conmovedores como devastadores.
¿Cuál es el mejor final del cine en tu opinión?
