El pastor y sus ovejas en Grimm [Crítica 2x05]

Un nuevo episodio se Grimm ha llegado y siguen las aventuras del detective Burkhardt ( David Giuntoli) en los dos mundos de la serie. The Good Shepherd se titula este capítulo donde se puede ver a un Butblad no tan bueno como Monroe ( Silas Weir Mitchell) que se aprovecha de sus fieles...O rebaño.

Un butblad lleno de secretos

El episodio número cinco de la segunda temporada de Grimm narra el crimen de un contador de una iglesia Wesen comandada por un pastor al parecer muy amable y dispuesto a perdonar los pecados de aquellos arrepentidos en nombre del Señor. Pero detrás de esa fachada, el reverendo Calvin ( Jonathan Scarfe) es un asesino que engaña a sus feligreses haciendo que junten dinero en colectas para luego quedárselo él y huir.

Todos los miembros de la parroquia excepto su líder son Seelenguter, algo parecido a ovejas humanas y Calvin, extrañamente es un Blutbad reformado, al igual que Monroe. El contador de la congregación desaparece junto con miles de dólares y haciéndose la víctima el pastor denuncia el hecho antes Nick y Hank ( Russell Honrsby) quienes comienzan a investigar y desde el comienzo descubren cosas que no terminan de cerrar con la historia.

Megan ( Kristina Anapau), una de las feligreses, es la amante del reverendo y su ex marido sufrió algo similar a lo del contador actual. Finalmente se descubre el cuerpo del hombre desaparecido y Nick decide ir buscar algo de ayuda, como de costumbre, en Monroe.

El buen amigo Blutbad se hace pasar por un vagabundo y se mezcla con los fieles de la Iglesia, pero su situación se vuelve peligrosa cuando las inocentes Seelenguter se enfadan al descubrir que su líder les ha robado. ¿Cómo sucede esto? Megan descubre que su pareja ha embarazado a una de las fieles y lo delata enfrente de todos ellos, quienes terminan matándolo a golpes cual rebaño descontrolado.

Las cosas no mejoran para Nick

Juliette ( Bitsie Tulloch) sigue sin recordar a Nick y sale con sus amigas a pasar tomar algo sin avisarle, como si no fuera su pareja ni tuvieran ataduras. Ellas se sorprenden de que no pueda recordarlo, incluso después de haberle propuesto casamiento y de tantos años juntos. Nick, paciente como siempre, no le hace problema por nada e incluso se ve un tibio acercamiento entre ellos cuando acuerdan que seguirán viviendo juntos a pesar de todo.

Nick debe pelear otra batalla gracias a su condición de Grimm y es contra el Nuckelavee que la Orden ha enviado para robarle la llave que posee. El sujeto ingresa a su casa, que por suerte estaba vacía y luego se dirige al tráiler de Nick para sorprenderlo cuando se encontraba investigando sobre el caso, como de costumbre. Entablar una encarnizada pelea y Nick termina matándolo con un antiguo martillo que saca del mueble de armas.

Un episodio sin grandes emociones en las historias secundarias, que seguramente darán que hablar en los próximos, sobre todo en lo que a Juliette concierne, ya que el Capitan Renard (Sasha Roiz) recuerda el beso que la sacó del coma todo el tiempo. Creo que ahí hay gato encerrado e intuyo que ese contacto traerá consecuencias no muy buenas para la joven pareja.

Mientras esperamos al próximo episodio, un avance del mismo, titulado Over my Dead Body.