El adios a Crixus en Spartacus: War of the Damned [Crítica 03x08 - 03x09]

Spartacus: War of the Damned está a punto de acabar y todos los caminos están llegando a su fin. Durante tres temporadas hemos acompañado a los personajes en la lucha para liberarse de los grilletes romanos y, a punto de ver su final, nos queda la esperanza de que esta libertad sea definitiva.

Como todas las críticas, esta llega con muchos spoilers que pueden estropear la experiencia de quienes no hayan visto los capítulos, por lo que les pido que consideren bien si desean continuar con la lectura.

La muerte también nos libera

Aún me veo afectada por la pérdida de Crixus ( Manu Bennett); hace mucho que sabía que su muerte llegaría antes del final, pero aún así me duele mucho no tener hasta el último momento a mi galo preferido. Como cualquier mujer sentimentaloide esperaba que los escritores de la série cambiaran un poco el destino de Crixus para que pudiera disfrutar de un futuro tranquilo y feliz con Naevia ( Cynthia Addai-Robinson), pero la historia mantuvo su fidelidad y los fans tuvimos que ver cómo lo decapitaban.

Lo que me ayuda a sobrellevar la pérdida de Crixus es la certeza de que Manu Bennett seguirá presente en la televisión representando al personaje de Slade Wilson en Arrow (pena que sea un personaje al que nunca le falta la camisa).

Me gustó mucho cuando los rebeldes deciden honrar a los muertos de la forma que se merecen. Sabemos que Crixus siempre será el Galo Invencible, más allá de que Spartacus lo remarcara o no, y la sangre de los romanos bañando las arenas del coliseo improvisado es el mejor regalo que le podrían haber hecho.

La cereza en el pastel sería la última pelea, pero Naevia supo, luego de derrotar a su oponente y honrar a su amado, controlar su temperamento para salvar a los rebeldes que seguían en manos de Crassus.

Crixus se fue de la forma en que deseaba, luchando por sus ideales. Podemos no estar de acuerdo con esa idea de pelear hasta la muerte, pero al menos supo disfrutar de su libertad junto al amor de su vida. Es es a lo que aspiraba cuando era esclavo.

Tiberius finalmente tiene lo que se merece

Durante nueve capítulos he deseado la muerte de Tiberius, y me la he imaginado de mil formas diferentes. Hubieron momentos en los que le tuve pena pero luego se esforzó para volver a ganarse el odio general, por lo que estoy muy contenta con su muerte.

Si, hubiese sido lindo que muriera a manos de Naevia, preferentemente decapìtado luego de sufrir infinitas heridas dolorosas, pero no tuvimos el gusto. Quien sí tuvo placer (y de forma muy merecida) en esta muerte es Kore ( Jenna Lind); nadie puede negar que ella se ganó la oportunidad de apuñalar a su antiguo amo.

A César ( Todd Lasance) le costó un poco saborear el momento, lo que es difícil de creer luego de haber tendido la emboscada para que Tiberius terminara en manos de los rebeldes. Siento que igual terminará traicionando a Kore y que le confesará a Crassus ( Simon Merrells) que fue ella quién mató a su hijo; en caso de que lo haga, espero que todos se enteren de que Tiberius lo violó.