Crítica de The Vampire Diaries 3x19: Heart of Darkness

Ahora sí en la recta final de la tercera temporada de The Vampire Diaries, y parece ser que las cosas están aumentando de temperatura entre Damon y Elena. Después de dos semanas de descanso, el show volvió con un viaje que preparó el terreno para lo que muchos han estado esperando. Además, algo inesperado hizo que las cosas se complicarán aún más.

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Besos en la noche 

Vamos a comenzar por lo que más dio de qué hablar en Heart of Darkness. Damon y Elena hicieron un pequeño viaje a Denver para traer a Jeremy ( Steve McQueen) de regreso. En el viaje de vuelta decidieron parar, nada más y nada menos que en un motel.

Obviamente, Elena no podía conciliar el sueño, y Damon ( Ian Somerhalder) tampoco, por lo que se acerca a la cama, se recuesta junto a ella y la toma de la mano. Acto seguido, Elena le quita la mano, y se va de la habitación, para luego dar paso al apasionado y fogoso beso que hacía tiempo veníamos esperando. 

Acá la situación es bastante clara, Elena tiene sentimientos por Damon (justamente el punto que Stefan estaba intentando probar), pero al mismo tiempo se siente culpable porque sabe en el fondo su conciencia le dice que Stefan es el hermano bueno, y por ende, debería ser el elegido.

Sabemos que parte de la historia está construido en base al triángulo amoroso, pero ya es hora de que algo definitivo suceda entre estos personajes, aunque a la larga vuelvan a cambiar de parecer, pero Elena tiene que tomar una decisión.

Imagen Warner Bros. Television

En menos tiempo de lo esperado, Jeremy hizo su aparición y dio por finalizado el momento. La expresión de Jeremy lo dijo todo, no le tiene mucho aprecio a Damon, e intenta cuidar a su hermana. En fin, el verdadero propósito de Jeremy era utilizar sus habilidades de “médium”, y así poder contactar a Rose ( Lauren Cohen) desde el más allá, para que averiguara quién la había convertido a ella.

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La efímera aparición de Rose tuvo otro motivo. Al parecer los guionistas utilizaron la conversación entre Jeremy y Rose para dar a entender cuáles son las razones por las cuales Elena puede estar con cualquiera de los hermanos Salvatore. Es claro que el amor que Stefan siente por Elena es puro y sincero, y ahora que ha vuelto a su antigua forma de ser, tiene aún más chances de retomar la relación.

Pero por otro lado, Damon ya ha confesado sus sentimientos por ella, y es evidente, que ella también siente algo por él. Pero el problema con Damon es que tiende a llevar las cosas al límite, y su forma de actuar siempre es precipitada y termina por echarlo todo a perder, tal como le ha sucedido en otras ocasiones.

Regresos inesperados

En Mystic Falls las cosas no están mucho mejor. Stefan ( Paul Wesley) quedó a cargo de Alaric ( Matt Davis), y se las tuvo que ingeniar para poder despertar al alter ego psicópata y que éste le confesara dónde quedó la última estaca capaz de matar a los originales. En medio de una forzada pelea (que sacó a relucir los lados más ocuros de estos dos personajes), Stefan logró sacarle la respuesta a Alaric. De pronto apareció Rebekah ( Claire Holt), y se lo llevó hasta la locación donde estaba escondido el artefacto.

Imagen Warner Bros. Television

El repentino regreso de Esther ( Alice Evans), seguido de su muerte fue algo bastante extraño, y no fue hasta el final cuando nos dimos cuenta que ahora, la bruja original, está utilizando el cuerpo de su hija. ¿Será que ahora el lado “malvado” de Alaric encontró una aliada?

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Otro personaje que también regresó fue Tayler ( Michael Trevino). La que más se alegró de verlo fue Caroline ( Candice Accola), y se notó por el apasionado reencuentro en el calabozo de los Lockwood. Caroline le contó a Tyler todo el asunto de los originales, y los lazos que los une a todo el resto de los vampiros, incluido él mismo. Pero el golpe más fuerte para Tyler, fue sin duda, el hecho de que Damon está dispuesto a cualquier cosa, inclusive si le cuesta la vida a Tyler. Por si fuera poco, no se puso más contento cuando se enteró que Klaus estuvo coqueteando con su novia.

La sesión de besos entre Elena y Damon fue algo bueno, esperemos que de una vez por todas le den más espacio a esta relación, y no volvamos al punto de partida de cuando la serie recién comenzó, es decir, Elena-Stefan. Y por ultimo, no podemos negar que el final fue de lo mejorcito, y de lo más inesperado, creo que nadie se esperaba semejante giro en la trama.

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