Crítica de Switched at Birth: el nuevo drama de ABC Family

Switched at Birth es una nueva apuesta al drama familiar de la cadena ABC Family y su estreno el pasado 6 de junio fue uno de los más vistos en la historia de la cadena, al punto que se han encargado 22 episodios más para completar la primera temporada.

La historia está centrada en dos jóvenes que son intercambiadas al nacer y crecen en ambientes totalmente distintos.

Bay (Vanessa Marano) y Daphne (Katie Leclerc) son dos chicas muy diferentes. La primera es artista y creció en el barrio adinerado de Mission Hills, la otra es sorda y juega al baloncesto en la escuela especial de Carlton. Pero uno de los puntos interesantes de la trama es como sus personalidades están relacionadas con sus padres biológicos.

Resulta que de pequeñas, por un error del hospital, fueron intercambiadas. Bay se siente atraída cuando conoce más acerca de las inclinaciones artísticas de su madre biológica, Regina, mientras que Daphne, aún siendo sorda debido a un caso de meningitis, es una gran deportista y eso se relaciona con sus verdadero padre: John era un jugador profesional de baseball.

Las dos familias se conocen y deberán aprender a sobrellevar sus diferencias y similitudes, y cuando invitan a la familia de Daphne a vivir en su casa de invitados para evitar los problemas financieros de Regina, empezarán a aflorar nuevos sentimientos.

El drama familiar de Switched at Birth incluye momentos muy tensos, como cuando Kathryn (la mamá adoptiva de Bay) empieza a buscar la forma de acercarse a Daphne aún dejando de lado a la que durante años fue su hija.

La primera temporada ya lleva varios episodios y con la confirmación de otros 22 llegaría a un total de 32, un número muy positivo para el nuevo proyecto dramático de ABC Family.