Ya tenemos rato disfrutando la llegada de la segunda temporada de The Leftovers y es una brisa de aire fresco que, además, supera en creces a su predecesora. Hasta ahora, media temporada ha transcurrido y estamos completamente encantados con su regreso.
5 cosas que nos encantan de la segunda temporada de The Leftovers

Veamos algunas de las razones de ello:
1. La huella de Lindelof en esta temporada
Damon Lindelof es uno de los maestros involucrados en la creación de la épica serie Lost y su firma puede notarse en esta segunda temporada, comenzando por “Axis Mundi”, el capítulo que abre la temporada, en el que nos muestran la milagrosa supervivencia de una integrante de una tribu milenaria y, posteriormente, el milagroso rescate de su –ahora– huérfana e indefensa hija recién nacida.
Por otro lado, lo particular que es Jarden (aka “Miracle”), un pueblo en el que una chica con vestido y velo de novia riega el jardín y un individuo pasea y degüella cabras. Ya sabemos el por qué de estos sucesos, pero lo particular de Jarden es que, aún así, este tipo de cosas sigan pasando, porque una cosa es entenderlas, pero justificarlas, es demasiado. A su vez, nos muestran una grieta en el suelo protegida como si fuera una exhibición de museo.
Nos intriga saber de dónde vino y por qué está enmarcada y protegida ¿será de los temblores? ¿consecuencia de un rayo? Además, esa regla tácita y, al parecer, sobreentendida por todos los residentes de no mencionar lo especial que es, en efecto, Miracle.

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2. La complejidad y amplitud de sus personajes
Todo buen drama necesita tener personajes complejos y en The Leftovers no solo cumplen esta regla, sino que, además, son variopintos y alejados totalmente de los estereotipos. John Murphy, por ejemplo, transmite encanto e intriga. En especial por esa sonrisa de maníaco loco que nos atemoriza y que puede explicarse por su tiempo en la cárcel, cosa que también explicaría esa necesidad por mantener el control y por mantenerse como una figura de poder –mediante la fuerza– dentro del pueblo. No es casualidad que sea el jefe de esa particularmente extraña fuerza de bomberos.
Nos topamos también con la honestidad de Kevin y Nora en el segundo episodio, “ A Matter of Geography” en el que, de manera natural y totalmente fiel a la historia y al carácter de cada personaje, como cuando Nora le contesta “yo contrato prostitutas para que me disparen”. Línea épica para recordar por siempre.
Por otra parte, vemos a Laurie en “Off Ramp”, que después de haber militado dentro de las filas de los Guilty Remanent, se da cuenta por primera vez en este capítulo todo lo que realmente ha implicado su corta membresía en el culto.

3. Hechos entrelazados y conexión de historias
Otra característica que nos encanta de esta temporada, es que se hace mucho más evidente cómo se conectan los sucesos. Y lo mejor es que todo esto pasa a un ritmo mucho más acelerado que en la primera temporada.
Lili, por ejemplo, la hija adoptiva de Nora y Kevin, ( #SpoilerAlert) resulta ser nada más y nada menos que la hija de Holy Wayne, la misma que sabíamos era “muy importante” porque Holy Wayne le informa de esto a Tommy en la primera temporada de la serie.
En otro orden de ideas, notamos que la primera vez que vemos en acción al particular escuadrón de bomberos es, precisamente, para incendiar la casa que, más adelante, nos enteramos que era la propiedad que Kevin y Nora habían alquilado para probar suerte viviendo en el tan popular y especialísimo Jarden.
Otro elemento de sincronía a destacar, es el agua de la bahía –la misma agua en la que Evie y sus amigas se daban un baño– haya desaparecido la noche en la que Kevin se lanza al agua, con un ladrillo amarrado al tobillo.

4. Las teorías científico-religiosas
En esta temporada nos presentan otras posibles explicaciones a las religiosas comunes, como por ejemplo, la figura de la “anomalía”. En el episodio “ A Matter of Geography” se introduce la posibilidad de que la causa de la Ascensión sea geográfica y no religiosa.
Esta es precisamente la razón por la que un grupo de científicos le paga a Nora casi 3 millones de dólares, es decir, el triple del valor de su casa para investigar qué hace del comedor de su casa un lugar tan especial. Recordemos de allí partieron su esposo y sus 2 hijos.
También está la teoría del lente. En el capítulo 6, “ Lens” nos presentan esta nueva hipótesis, en la que un individuo funge el papel de una lente amplificadora del efecto “dissapear” o “departidor”, por llamarlo de alguna manera.
Esta teoría tiene creyentes y seguidores del lado de la ciencia y del lado de la religión, y en este capítulo nos asoman que hasta el Vaticano está familiarizado con esto.
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5. Regresan las voces del más allá
En la primera temporada de The Leftovers fuimos testigos de numerosas conversas entre el padre de Kevin y personajes aparentemente inexistentes. Personas que él aseguraba que estaban ahí, pero que nosotros nunca vimos. Esta segunda temporada, esta situación se repite, en varias oportunidades.
Pero, ahora Kevin también las oye, al igual que su padre. Como Virgil, el viejo que ahora sabemos está emparentado con Érika, parece escuchar las voces también. Al igual que el padre de Kevin, parece tener más información de la posiblemente disponible.
Y por último, el vagabundo de la torre: ese misterioso tipo que vive sobre la torre Miracle, que le gusta la cocina de Érika y que envía cartas a Australia, parece que puede ver y escuchar a Pati.

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