Acuario - Sábado 26 de marzo: Sé cortés y elegante, pero firme, pisciano

Por el Profesor Zellagro. Un aviso, acuariano. Debido al tránsito planetario actual y el movimiento de la Luna estás demasiado sensitivo y cualquier cosa que te digan puede herirte o tal vez la interpretes del modo equivocado. No te dejes envolver por pensamientos tristes ya que eso no tiene que ver nada con la naturaleza creativa, independiente y optimista de tu extraordinario signo acuariano. Ten cuidado con quienes comentas tus asuntos personales. Una persona entrometida y enredadora puede estarte molestando mucho con sus impertinencias y comentarios acerca de tu pareja y relación actual. No le des entrada en tu hogar y así evitarás tener al enemigo bajo tu propio techo. Sé cortés y elegante, pero firme.

Amor
Este sábado la Luna sigue en tránsito por Escorpión y los planetas Júpiter y Saturno están retrógrados. Debes poner las cosas en su sitio en el plano amoroso y no dejarte llevar solamente por impulsos pues el amor te da vueltas y no lo debes dejar escapar particularmente si ahora estás soltero o soltera o en momentos delicados dentro de una relación.

Salud
Hay armonía en tu horizonte astral. Con estas magníficas vibraciones tu salud se mejora y logras recuperarte de los padecimientos habituales que te han estado afectando últimamente. No desoigas consejos y escucha más tu organismo. Tú sabes cómo hacerlo.

Trabajo
Mantén una actitud alerta porque las ocasiones de mejoramiento laboral pasarán de manera rápida frente a ti y tendrás que atraparlas. Una persona amiga te va a sorprender al plantearte cierta proposición asociada a un negocio. Escúchala, mas no te apresures a firmar nada ahora hasta que pase el tiempo de la reflexión y el análisis de los “pros” y los “contras” de dicha proposición.

Dinero y fortuna
Si te sentías asfixiado por algo que no podías pagar muy pronto recibirás buenas noticias, pero cuidado con extralimitarte si te llega un préstamo inesperadamente o una tarjeta de crédito nueva pues podrías contraer deudas en vez de saldarlas guiándote por un impulso gastador.