¿No tiene sin queso?: problemas de ser vegano en la CDMX

Ser vegano sin duda tiene sus desventajas en cualquier parte del mundo. La carne es considerada una parte vital en la dieta diaria y los comerciales te hacen creer que si no tomas leche seguido morirás de osteoporosis a los 26.

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Hay algo en no consumir productos de origen animal que desconcierta a la gente, como si les dijeras que de hoy en adelante sólo usarás zapatos izquierdos. Aunque tú sabes y los expertos saben que vivir a la vegana es posible.

Eres capaz de ingeniártelas para preparar comidas vegetales deliciosas y conoces un par de restaurantes que no te fallan. Pero hay algunos problemas, sobre todo con la gente que te rodea, que parecieran ser insalvables, no importa cuanta maña ya tengas. Luego en México, en donde le echamos carne y queso a todo. A TODO.

Aquí te contamos 5 problemas que seguro has enfrentado si eres vegano en la Ciudad de México:

#1 Eres “la piedrita en el zapato” de las reuniones

Cuando te juntas con tu familia, amigos, conocidos o cualquier grupo humano, la hora de comer se vuelve un problema. Por lo general no tienes inconvenientes con que los demás coman carne cerca de ti, pero el hecho de que tú no lo hagas tiende a volverte el centro de atención.

Sabes que existe un amplio y rico menú vegano que hasta los omnívoros podrían disfrutar, pero no, según siempre es un problema encontrarte comida y moriremos todos de inanición antes de ponernos de acuerdo a dónde ir a cenar. Porque "¿comida mexicana sin carne? Eso no debe existir". Y si sí, "seguro sabe a pasto". ?

Ah, por supuesto. La peor pesadilla de un vegano en México: todos quieren tacos siempre.

#2 Estar preguntando los ingredientes de todo

Aunque pidas una inocente ensalada, no te quedas tranquilo hasta preguntar con exactitud qué lleva. Porque aunque tenga trocitos de tocino, muchas personas todavía creen que, por ser una ensalada, ya es vegana. O que el huevo, el queso o hasta el atún son veganos. Khé!?

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Una vez, en una cadena de restaurantes, pregunté si no preparaban su café con leche que no fuera de vaca. La mesera me contestó que también tenían deslactosada. Y yo: “Am, esa es de vaca…”.

Te invitamos a leer: ¿Qué tan saludable es comer carne?

#3 El bullying

Si eres diferente, seguro serás el blanco de los dardos del bullying. “Mira, ahí viene al que le gusta la verduraaa”, porque los albures no faltan nunca jamás. Eso o que te canten la canción de los Simpson de “No vives de ensalada”.

Sí, reírse de uno mismo es saludable y bla, bla, bla. Pero cuando eres el objetivo de apodos o chistes cada que vas a comer (o sea, a cada rato), pierde la gracia después de la millonésima vez.

Eso si es que alguna vez fue gracioso. (Probablemente nunca lo fue, sobre todo para ti).

#4 Tener que explicarte TODO el tiempo

“Vamos por unos helados”.

“No, gracias”.

“¿Por qué? No me digas que estás a dieta”.

“No, es que soy vegana y pues, no tomo leche”.

*cara de preocupación* “Ayyy, ¿por qué?".

Y eso es tooodos los días.

Admítelo, alguna vez le has dicho a alguien que no puedes comer tal cosa por alergias, porque la gente al parecer encuentra más aceptable no comer carne por ser alérgico que sólo porque no quieres.

#5 La gente te aconseja cómo sí deberías comer "bien"

Cuando te sales de la norma, las mayorías sienten la necesidad de decirte como sí deberías llevar tu vida. “Ay, pero si yo siempre he comido carne y nunca me ha pasado nada”. “Ay, pero si los seres humanos comen carne desde que eran cavernícolas y no hay problema”. “Ay, pero si los animales se comen entre ellos”. “¿O SEA QUE NUNCA VOLERÁS A COMER TACOS O PIZZA?”.

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OK, sí. Si esas ideas siguen a la hora de poner comida en su plato, está bien. Además, también hay pizza y tacos veganos. Pero ¿por qué si tú no los obligas a que se vuelvan veganos ellos sí insisten en regresarte a ser omnívoro? ?

"El respeto al derecho ajeno es la paz", chavos.

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