La espuma de la cerveza

Algunos prefieren beber su cerveza con espuma, otros sin. Más allá de las preferencias de cada uno, la espuma de la cerveza nos ‘habla’ sobre ella, ¿cómo? Bueno, hoy vamos a indagar un poco en la espuma de la cerveza.

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La espuma de la cerveza nos abre un abanico de experiencias para nuestros sentidos, cada una de esas pequeñas burbujas está llevando una nube de aroma hacia nuestra nariz. Por eso te recomiendo respirar profundamente antes de beberla para notar su aroma.

El aroma juega un papel muy importante en nuestra percepción del sabor, así que una buena espuma que permita desprender los aromas de la cerveza es fundamental para lograr una buena percepción sensorial.

Imagen thinkstock

La espuma también afecta la manera en que la cerveza se siente en la boca, la densidad y la cremosidad son necesarias para obtener una sensación placentera en boca.

La calidad de la espuma en un vaso de cerveza es el resultado de muchos factores: cómo se elabora la cerveza, los ingredientes utilizados, el nivel de carbonatación y cómo se sirve, entre otros.

Esta espuma se disipa rápidamente si hay aceites residuales en el vaso o incluso en los labios. Al servirla, se debe hacerlo por uno de los lados del vaso para obtener una buena espuma que perdure un poco más.

La cantidad y la calidad de la espuma también puede depender del tipo de cerveza y su cantidad de alcohol, este último inhibe la formación de espuma.

Ahora bien, ¿cómo piensas pedir tu próxima cerveza?, beberla con espuma es una excelente opción para disfrutar plenamente de esta bebida.

Si quieren conocer un poco más sobre la cerveza no pueden dejar de visitar la sección de cerveza de ElGranCatador, y si quieren dejarnos algún comentario no duden en hacerlo a continuación.

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