Guía Peñín: la guía gourmet de los vinos españoles

Guías, consejos, sabelotodo, tipos que se la dan de entendidos, que hacen sobresalir el dedo meñique de la copa cuando olfatean más que captan el aroma de un buen caldo, aficionados, amateurs, conocedores, expertos y todo tipo de ralea ha oído hablar alguna vez de la Guía Peñín de los vinos.

Como era de esperar, mientras escribo este artículo, el corrector ortográfico de Word no reconoce el término Peñín. Pero, bueno, no vamos a entrar en disquisiciones sobre qué puede saber un programa creado para reconocer palabras cuando hay palabras que no pueden describir el placer, las sensaciones y los efectos de un gran vino.

José Peñín: Opiniones con Ñ y tilde

Guías con nombre de pluma  y de neumáticos

Ustedes me van a perdonar, pero si quiero saber la opinión de alguien sobre un buen vino, aprovechando mi ignorancia supina del idioma de la pérfida Albión y mi desconocimiento por falta de insistencia de la lengua de la Galia, me quedo en casa. Guías que se llaman Parker, como las plumas estilográficas, o Michelin, como una marca fabricante de neumáticos, no me inspiran gran confianza.

Tal vez esa sea una de las claves del éxito de la Guía Peñín que se edita anualmente desde 1994. Esa el empeño de hablar de vinos que, tradicionalmente, por precio, nunca hubieran tenido el honor ni de ser mencionados.

Desde esa fecha, aparecer en la Guía Peñín es ya un logro. Conseguir una buena puntuación sólo depende de la calidad, ya que si por algo se tienen en tan alta estima sus opiniones, es porque José Peñín no se vende al mejor postor.

Confianza y buen gusto como clave del éxito

José Peñín empezó su singladura en el mundo del vino y de las publicaciones sobre la cultura viti-vinícola en la década de los setentas. A día de hoy, su guía es una referencia a nivel internacional de los vinos españoles o en español. No es baladí buscar y encontrar las diferencias en las calificaciones de su guía y las otras —cada vez más, por suerte para los consumidores y amantes del jugo de la uva— que se publican en todos los países.

José Peñín no habla de oídas, ha probado todos los caldos, es miembro habitual de los mejores concursos de cata, ha recorrido casi todos los viñedos del mundo y, por eso, cada uno de sus elogios o deméritos son tenidos en cuento por miles de personas.

Con solo entrar en su web personal nos damos cuenta de que estamos ante una persona que vive por y para el mundo del vino. Comprobamos que no se trata de una pose, de un personaje que representa para vender un ejemplar más de su Guía anual. Se trata de alguien que aprecia, gusta y disfruta cada sorbo de un buen vino y tiene la necesidad de compartirlo con los demás; justamente una de las cualidades de un gran vino: beberlo en compañía.