Delicioso pan blanco con miel, ideal para refuerzos

Desde que tengo mi máquina de pan no dejo de probar nuevas recetas, la verdad es que me encanta tener pan casero para desayunar. Ya he preparado varias recetas, algunas de ellas son: el Panettone o el Pan integral con semillas, recetas que he compartido contigo aquí en la cocina de Eli.

Hay algunas que las hago una vez y guardo la receta, y de tanto en tanto repito esas que se transformaron en ¨favoritas¨. El Pan blanco con miel es una de esas recetas que ya he hecho varias veces y pienso seguir haciendo ya que no me defrauda y es ideal para comer con jamón y queso, o en sándwich.

Es un pan blanco, medio dulzón con buena miga y corteza. Se puede preparar a mano y cocinar en un molde de pan, no es necesario tener una panera para hacerlo.

Pan blanco con miel

Ingredientes:

• 1 ¼ taza de agua tibia
• 1 ½ cucharada de miel
• 1 ½ cucharada de manteca
• 1 ½ cucharadita de sal
• 3 tazas de harina
• 1 ½ cucharadita de levadura instantánea seca

Procedimiento:

Se puede preparar a mano o en máquina de pan. Yo la preparé en máquina, pero no es indispensable.

 Si vas a prepararlo a mano coloca los ingredientes secos en un recipiente, agrega los ingredientes húmedos e incorpora hasta formar una masa, después hay que amasar y amasar hasta lograr una masa homogénea.

Deja levar la masa tapada, hasta que duplique su tamaño. Cuando duplicó su tamaño amasa un poco más y divide en la cantidad de panes que vayas a preparar, o en uno solo si vas a hacer un gran pan.

Coloca en el molde que vayas a emplear y deja que leunde 30 minutos o un poco más, tapado en un lugar templado hornea en horno moderado por 40 minutos aproximadamente o hasta que al insertar un palito de brochet salga limpio.

 Para hacerlo en máquina de pan debes de tener en cuenta las recomendaciones del fabricante. En mi máquina se colocan primero los ingredientes húmedos y la sal, luego los secos y arriba de todo la levadura.

Se pone el programa de pan blanco, o pan blanco rápido si estamos muy apurados para saborearlo y listo, solo hay que esperar un rato para disfrutarlo yo incluso lo preparo en el programa súper rápido que demora menos de una hora.

Se puede servir en cualquier ocasión, desayuno, merienda, almuerzo o cena, e incluso es perfecto para preparar sándwich. Se puede cortar en trozos, guardar en el congelador, sacar y tostar para consumir.