¿Cómo combinar en cócteles y tragos la fruta de la pasión?

Es muy probable que la fruta de la pasión o parchita sea considerada una de las más apreciadas en términos de frutas tropicales para la elaboración de bebidas. Aunque sus semillas pueden resultar complicadas a la hora de triturar, el sabor de este fruto es realmente conquistador para cualquier paladar, esté o no acostumbrado a este tipo de sensaciones clásicas del trópico.

Precisamente porque suele ser casi siempre un acierto seguro, hoy en El Gran Catador queremos hablarte de cómo  combinar en cócteles y tragos la fruta de la pasión.

El alcohol que mejor encaja con la fruta de la pasión

Su sabor intenso al principio, y el deje suave que se mantiene a lo largo de unos cuantos segundos hacen que vaya bien con prácticamente cualquier licor que no tenga unas notas muy fuertes. Hay que decir que con el ron hacen una combinación exquisita, sobre todo si hablamos de una bebida latina, con su gusto a azúcar de caña.

Otras bebidas alcohólicas que combinan muy bien con esta fruta son definitivamente el vodka y el martini. Ambos licores son capaces de dejar todo el protagonismo a la fruta de la pasión y añadir simplemente el contenido alcohólico a la mezcla. Además ésta puede luego combinarse con otros zumos o decoraciones. 

Cócteles sin alcohol

Pero la fruta de la pasión no es solamente el aliado perfecto para combinar con alcohol. También lo es para preparar bebidas refrescantes sin éste. De hecho, su zumo combina a la perfección con el de frutas del bosque, obteniendo una mezcla colorida, llamativa y deliciosa. También se puede optar por la preparación de granizados que se consiguen congelándola y triturando luego el hielo obtenido. Estos puedes mezclarlos con otros zumos, como el de lima o el de piña, para conseguir una mezcla más ácida pero igualmente deliciosa.

Como ves, la fruta de la pasión ofrece múltiples combinaciones para conseguir tragos y bebidas realmente buenos. Está solo en tu mano ponerla sobre la mesa, porque además en grandes superficies es fácil de conseguir aún sin vivir en climas tropicales de los que procede.