¿Qué harías si pudieras disfrutar de frituras sin tanta culpa?
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Aprende a freír otros vegetales, descubre los secretos del tempura de verduras, y emplea estos tips y recetas para consentirte.
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Para que te queden crujientes, doradas y sin exceso de aceite, aquí unas recomendaciones previas.
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1. Utiliza abundante aceite de buena calidad.
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2. Caliéntalo a elevadas temperaturas y cocina las frituras durante pocos instantes.
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3. Retíralas del aceite, escúrrelas sobre papel de cocina, échales sal mientras estén calientes y consúmelas inmediatamente.
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Tip extra: para identificar cuál es el punto de calor adecuado del aceite, coloca un fósforo de madera. Cuando se formen pequeñas burbujas a su alrededor, ¡es momento de comenzar a freír! ¡Ahora sí, las recetas!
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Batatas o camote frito: este tubérculo es ideal para freír en bastones.
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Luego de cortarlos, sécalos con papel de cocina antes de freírlos.
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Utiliza aceite de uva para la cocción ya que, además de tener un sabor delicioso, tiene un punto de humeo alto, es decir, puede calentarse por más tiempo sin quemarse, resultando perfecto para las frituras
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Tip: acompaña tus bastones crujientes con un dip de alioli.
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Calabaza milanese. Toma una calabaza, pélala y córtala en finas rebanadas. Pásalas por huevo batido condimentado con sal y nuez moscada, y rebózalas en pan rallado.
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Luego, fríelas en abundante aceite de oliva por tan solo un instante, hasta que el rebozado adopte un color dorado. Sírvelas con una ensalada fresca. Un mimo gastronómico delicioso.
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Deli remolacha. Este tubérculo frito es fabuloso. Toma una mandolina y córtalo en finas rodajas.
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Fríelas en abundante aceite de maíz. Solo toma unos segundos cocer estas chips bordó.
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Una vez que las pruebes, ¡no querrás volver a las patatas!
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Tempura de vegetales. Esta receta japonesa ha traspasado las fronteras, para convertirse en un favorito del mundo.
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Mezcla 2 tazas de agua bien helada con un huevo, hasta formar una crema. Agrega unas 2 tazas de harina. Mezcla hasta homogeneizar, pero no te excedas, porque no queremos que se active el gluten.
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Pasa los vegetales por la mezcla y fríelos en abundante aceite de canola.
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Prueba con brócoli, coliflor, hongos, nabo… o las verduras que más te gusten. Recuerda que estas frituras tomarán un tono claro, no dorado, pero son muy crujientes.
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Hay un mundo de sabores más allá de las patatas fritas. ¡Atrévete a descubrirlo!