Bebidas alcohólicas realizadas por religiosos

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Siempre que hablamos de bebidas alcohólicas elaboradas por religiosos se nos viene a la mente el licor de huevo. Lo cierto es que, desde hace cientos de años muchas órdenes monásticas elaboran licores, aguardientes y fermentos dignos de adoración divina. Muchos de estos licores tuvieron en sus inicios la intención de servir de digestivos; en relación a los fermentos como el vino o la cerveza tienen más bien connotaciones religiosas. En esta entrega, conoce una variedad de bebidas alcohólicas realizadas por religiosos.

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Eyguebelle

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Los monjes cistercienses se encargan de elaborar en la abadía de Eyguebelle licores elaborados con hierbas y frutas desde 1239. Esta tradición se ha desarrollado a lo largo de los siglos y en la actualidad comercializan estos ancestrales productos junto con otros, como el brandy Williams Pear, conocido como “Agua de Vida”. Elaborado con peras seleccionadas y con un añejamiento de 18 meses en las cavas del monasterio, es una delicia dulce al paladar. Disponible en botellas de 70 cl.

Lérins

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Entre los años 400 y 410 de nuestra era se funda en la isla de Honorat la comunidad monástica de Lérins. Este monasterio tuvo una gran influencia en Europa, a tal punto que el propio San Patricio pasó una temporada recluido ahí. Parte de la tradición de estos monjes es la elaboración de vino. En honor San Honorat, fundador de la comunidad y por quien la isla lleva su nombre se elabora un vino Syrah de color intenso con olores a frutos oscuros. Se comercializa en botella de 75 cl.

New Clairvaux

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Pero no sólo en el Viejo Continente los monjes elaboran vino. En 1955 se funda el monasterio de New Clairvaux en California. Dentro del monasterio se cultivan diversas variedades de uva de las que resultan vinos hechos con mucho amor y gran cuidado. Ejemplo de ello es su Vino Dolce. A este vino se le agrega a la mitad de su proceso de fermentación brandy puro de uva para realzar su dulzura.

Chimay

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Pero además de vinos y licores los monjes cistercienses también han incursionado en la elaboración de cerveza. En la abadía de Scourmont, en Chimay se dedican a la elaboración de cinco tipos de cerveza. Entre ellas su Chimay Etiqueta Azul es también conocida como “Grande Reserve”. Heredera de la tradición de cervezas belgas es una cerveza seca, con toques dulces. Con 9% de alcohol se distribuye en botellas de 330 y 750 ml.

¿Conoces algún otro producto realizado por religiosos? ¿Has estado en algún monasterio? Dinos cuál de estas bebidas te gustaría probar primero.

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