El Pentágono realizó este miércoles una prueba exitosa de su escudo antimisiles en Alaska, una semana después de que Corea del Norte probara un misil que, en teoría, podría alcanzar ese territorio estadounidense.
EEUU prueba con éxito escudo antimisiles en Alaska en medio de tensiones con Corea del Norte
Tras una prueba fallida a finales de junio, el Pentágono anunció este miércoles que el ensayo de su sistema para destruir misiles de gran altitud fue exitoso. Ocurre una semana despúes de que el régimen de Pyongyang probara su primer misil balístico intercontinental.


El ensayo se realizó con el Sistema de Defensa Terminal de Área a Gran Altitud, el mismo que Washington desea instalar en Corea del Sur y al que se opone China.
De acuerdo con el comunicado, el sistema interceptó y destruyó un misil de práctica lanzado desde Hawai hacia la zona de Kodiak, en Alaska.
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El Pentágono explicó que la prueba se realizó desde la base de la 11 Brigada de Artillería Aérea de Defensa y se utilizaron los mismos procedimientos que en un escenario de combate.
Otro ensayo similar del sistema tuvo lugar a finales de junio en Hawai, aunque falló al alcanzar su objetivo.
“No podría sentirme más orgulloso del equipo de Gobierno y del contratista que ha llevado a cabo esta prueba de vuelo”, aseguró el director de la Agencia de Defensa de Misiles de Estados Unidos, Sam Greaves.
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No obstante, este tipo de escudo no está diseñado para interceptar un misil balístico intercontinental, como el que probó la semana pasada Pyongyang, sino otro sistema denominado Ground-based Midcourse Defense.
Respuesta a Corea del Norte
El martes, pasado, Día de la Independencia de Estados Unidos, Corea del Norte lanzó un misil que voló más tiempo que cualquier otro utilizado hasta la fecha por Pyongyang y que, según algunos especialistas, podría alcanzar Alaska a unoas 4,000 millas de distancia.
Recorrió una distancia de más de 280 millas, voló a una altitud máxima de 350 millas en dirección este y, en teoría, cayó en aguas de la Zona Económica Exclusiva de Japón.
Tras analizar el lanzamiento, el Pentágono aseguró que se trataba de un misil “nunca antes visto” en el arsenal de Pyongyang.





















