Varios grupos palestinos llamaron este jueves, un día de relativa calma, a protagonizar un "Viernes de la Ira", con manifestaciones después del rezo semanal, en medio de la ola de apuñalamientos que ha provocado pánico en Israel.
Atacantes palestinos queman el complejo de la tumba del patriarca José
El Viernes de la Ira, convocado por facciones radicales islamistas, se ceba en un sitio sagrado para el pueblo judío, que ha quedado seriamente dañado.
Por:Univision.com
El "Viernes de la Ira" se inició de madrugada cerca de Cisjordania
Imagen The Associated Press
El llamado de las facciones Hamas, Yihad Islámica y Al Fatah la madrugada de este viernes comenzó con la quema del complejo de la Tumba del patriarca José, cerca de Nablús, al norte de Cisjordania.
"A lo largo de la noche, decenas de palestinos prendieron fuego a la Tumba de José, en Nablus. Fuerzas palestinas llegaron al lugar, extinguieron el fuego y dispersaron a los incendiarios. El Ejército israelí hará las reparaciones necesarias para permitir a los fieles visitar el lugar sagrado", informa un comunicadodel Ejército israelí.
José fue uno de los hijos del profeta Jacob. Según la Biblia, fue vendido por sus hermanos y fue trasladado a Egipto. Para los judíos, esta tumba tiene una gran significación y se ha convertido en un lugar de peregrinaje.
Fuerzas de seguridad de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) lograron apagar el incendio del complejo, un sitio sagrado para el pueblo judío que está custodiado por la ANP, y dispersar a los atacantes encapuchados.
El reciento ha quedado seriamente dañado.
El mausoleo se encuentra en "zona A", donde la ANP tiene pleno control administrativo y de seguridad, de acuerdo a la división territorial establecida en los Acuerdos de Oslo de 1993.
Según el diario Haaretz, el ataque tuvo lugar cuando cientos de jóvenes palestinos acudieron cerca del complejo y le lanzaron cócteles molotov, además de entrar en la tumba para introducir materiales inflamables.
Netanyuahu acepta reunirse con Abas
El recrudecimiento del conflicto ya ha cobrado esta semana la vida de siete israelíes y unos treinta palestinos, incluyendo varios presuntos autores de los ataques con arma blanca.
Ante la crisis, el primer ministro Benjamin Netanyahu expresó su voluntad de reunirse con el líder de la Autoridad Palestina, Mahmud Abas.
"Es el momento de que el presidente Abas deje de justificarlo, pero también de instar a la violencia", dijo Netanyahu a los periodistas.
Abas pidió el miércoles formas pacíficas de resistencia, un llamamiento que corre el riesgo de ser ignorado por los jóvenes palestinos hartos de la ocupación israelí y de la falta de avances en las negociaciones con vistas a la creación de un Estado palestino.
La ola de violencia se intensificó a partir del 1 de octubre, cuando presuntos miembros del movimiento islamista Hamas mataron a tiros a una pareja de colonos judíos en Cisjordania, en presencia de sus hijos.
En los días anteriores, se habían producido numerosos enfrentamientos entre fuerzas de seguridad israelíes y jóvenes palestinos en la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén.
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