¡Actívate! 5 tips para elegir un ejercicio que se adapte a tu personalidad y estilo de vida
Ejercitarnos es un pilar importante para alcanzar el balance que nuestra vida necesita. Además de sus múltiples beneficios físicos, nos ayuda mental y hasta emocionalmente. Por eso es vital que escojamos una actividad que sume cosas positivas.
Para empezar, es importante recordar que no todas las actividades físicas son para todos, ya que cada uno tiene un estilo de vida distinto. Hay a quien no le gusta visitar el gimnasio o el que está retomando el ejercicio después de muchos tiempo inactivo, por mencionar algunos. Por ello, a continuación te daremos unos importantes consejos para elegir el ejercicio que vaya mejor contigo.
1. Identifica tu entorno preferido
Cuando hablamos de hacer ejercicio de inmediato llega a nosotros la imagen de un gimnasio. Si bien es cierto que el gym es un excelente lugar para ejercitarnos, no todas las personas son de gimnasio. Ya sea por la gente, la rutina, los instructores o tener que esperar para ocupar los aparatos, puede que ese ambiente no sea lo tuyo y no hay ningún problema. Identificar tu entorno preferido es muy importante, si prefieres el ejercicio al aire libre, la bicicleta, correr o practicar algún deporte como fútbol pueden ser opciones excelentes para ti.
2. Toma en cuenta tu actividad física regular
Si llevas mucho tiempo sin hacer ejercicio, es probable que cuando vuelvas a practicarlo quieras dar el 200% para obtener resultados lo más pronto posible, el problema es que esto es contraproducente, ya que exponer a tu cuerpo a actividades pesadas después de mucho tiempo inactivo puede acarrear lesiones o otros malestares.
Empieza despacio, puede comenzar caminando 30 minutos al día o con algún videojuego tipo Wii Fit, así irás acondicionando tu cuerpo y con el tiempo podrás subir el nivel a actividades más pesadas.
3. Sé honesto con tu manera de ser
Realizar actividades físicas en grupo es una excelente idea, motivas tu sentido de competencia y al mismo tiempo hay un apoyo mutuo entre todos, lo cual puede ayudarte a conseguir mejores resultados, excepto si eres alguien introvertido.
Si ese es tu caso, podrías llegar a sentirte incómodo y pasarías un mal rato. Sé honesto con tu manera de ser, date cuenta si eres introvertido o extrovertido y con base en ello elige si tu actividad será individual o en grupo.
4. Considera cuánto tiempo podrás invertirle al ejercicio
En este ritmo de vida tan ajetreado es probable que no podamos tener el tiempo de ir al gimnasio para ejercitarnos. Sin embargo, este no debe ser un impedimento, hay ejercicios que puedes hacer en la comodidad de tu trabajo o en el patio de la escuela. Puedes utilizar la orilla de tu escritorio para hacer algunas lagartijas de pie o practicar sentadillas levantándote de tu silla regularmente. Aunque no lo creas, estos sencillos ejercicios te ayudarán bastante.
5. Piensa si te ves haciendo ejercicio a largo plazo o no
Para aprovecharlo al máximo y apreciar sus beneficios, el ejercicio debe ser una actividad recurrente en tu vida. Antes de iniciar una actividad de este tipo, piensa si te ves haciéndola dentro de seis meses o medio año. Si te aburres fácilmente o no te agrada la rutina, podrías intentar una actividad distinta cada dos meses, por ejemplo, pasar de la natación, a la bicicleta o correr. Además de no aburrirte, podrás ejercitar distintas partes del cuerpo.
Cada persona es un mundo, todos tenemos estilos de vida y rutinas distintas. Esperamos que con los 5 consejos que acabamos de darte, te sea más sencillo identificar qué ejercicio se adapta mejor a ti y así des el primer paso para practicarlo y mejorar tu vida. ¡Sí se puede!
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