Si hay un político en el mundo que ha sentido el calor de los documentos filtrados, los llamados Papeles de Panamá, ese ha sido el primer ministro de Islandia Sigmundur David Gunnlaugsson.
Los Papeles de Panamá y el bochorno del primer ministro de Islandia
Sigmundur David Gunnlaugsson ha sido sin duda el político más afectado por Los Papeles de Panamá. Su reacción a una entrevista lo dijo todo.

El mandatario enfrenta un voto de censura en el Parlamento y protestas en la capital del país, luego de que los documentos filtrados revelaran que ocultó millones de dólares en tres grandes bancos del país durante la crisis financiera que experimentó.
Y según esta revelación, Gunnlaugsson creó en 2007 junto a la que sería su esposa, la compañía offshore Wintris en las Islas Vírgenes, un clásico paraíso fiscal, hecho que nunca dio a conocer cuando fue electo primer ministro años después.
Pero lo que puso contra la pared al primer ministro fue la entrevista que le hicieron dos reporteros del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, el grupo que puso la lupa a los millones de documentos filtrados de la firma panameña Mossack Fonseca y que ya han causado revuelo a nivel mundial por su alcance y magnitud, revelando detalles de operaciones financieras de figuras que van desde el presidente de Rusia, Vladimir Putin, su colega argentino Mauricio Macri, la estrella del fútbol Lionel Messi e incluso el cineasta español, Pedro Almodovar.
"¿Qué opina sobre aquellas personas que en sus empresas utilizan paraísos fiscales para ocultar su patromonio?", le preguntó uno de los reporteros para comenzar a calentar los motores.
Completamente desprevenido de lo que vendría después, el político dice que en su país eso se toma "muy en serio".
Es entonces cuando los periodistas lanzan la bomba: "¿Ha tenido usted alguna conexión con una compañía offshore?"
Desconcertado, haciendo varias pausas y visiblemente nervioso, Gunnlaugsson dice entrecortándose: "¿Yo? bueno... las compañías islandesas en las que he trabajado tenían relación...".
Y allí empieza el calvario para el político, que afirma que ese tipo de preguntas en su país son consideradas una acusación directa, pero insiste en que nunca ha ocultado su patrimonio.
Es allí cuando le hablan de Wintris, creada con la ayuda de la empresa panamena en el ojo del huracán: Mossack Fonseca.
Al político no le queda otro remedio que reconocer que Wintris tenía relación con las compañías en las que trabajó.
De allí en adelante su molesta se hace más evidente hasta el punto en que decide levantarse y salir de la habitación.
De allí en adelante las cosas se han puesto peor para el mandatario de islandia, un país caracterizado justamente por la transparencia en temas de administración pública.
Por ejemplo, más de 16,000 islandeses ya han firmado una petición para que Gunnlaugsson dimita, cosa que también ha pedido la ex primera ministra Johanna Sigurdardotti.
Pero lo que podría marcar su destino político es el voto de censura al que se someterá en las próximas horas, lo que aceleraría la posibilidad de que termine renunciando al gobierno.
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