Murallas españolas: Las murallas romanas de Tarragona
Tarragona es normalmente conocida por haber sido una de las ciudades romanas más importantes en territorio español. El legado de este imperio puede respirarse en muchos rincones de la ciudad, entre los cuales destacan desde luego el Teatro Romano y los restos del Circo Masimo.
Las murallas romanas de Tarragona (la vieja Tarraco) forman parte del legado del imperio romano, y se enmarcan en el conjunto de restos romanos de la ciudad, con diferencia lo que más atrae al turismo de todo el mundo.
Construidas a finales del siglo II, se sabe que las murallas romanas tuvieron una ampliación en el correr de este siglo (era de los Escipiones). La muralla originalmente contaba con cuatro kilómetros de ancho, pero hoy en día se conserva un solo kilómetro, en el cual aún sobreviven la Torre del Arquebisbe, la Torre del Cabiscon y la Torre de Minerva.
Reconstrucción de la antigua Tarraco amurallada. Observamos la clásica formación trapezoidal de las típicas murallas romanas.
La parte baja de la muralla se forma por grandes bloques de piedra que datan de tiempos íberos. En la parte alta se forma de sillares, y ambas partes carecen de argamasa entre las piedras.
Yo visité Tarragona hace unos meses, y puedo decir que es la ciudad española con restos romanos en los que más se plasma el estilo arquitectónico, producto de un importante trabajo arqueológico de conservación. Todo vestigio de historia en ella tiene una hermosa estampa romana que la hace resaltar entre las ciudades romanas más bellas de toda España.
Hacer una parada en Tarragona para conocer el legado romano de la ciudad es una obligación para el turista que visita Cataluña. La ciudad de Tarragona tiene encantos para ofrecer que no todas las ciudades poseen, entre los cuales, desde luego, se encuentran sus hermosas murallas.
Vía | SpanishArts