Tomar fotografías cuando viajamos es un obligado más complejo de lo que pensamos, pero tampoco una odisea. Pequeños detalles, una prioridad de la luz o una técnica creativa son suficientes para conseguir las mejores instantáneas que llenaran nuestro futuro de recuerdos y nostalgia. Agarra todo lo que necesites antes de partir (tarjeta, cámara, lentes, etc.) y anota estas tips para mejorar tus fotos de viaje.
Limpieza
Tomamos fotos que destilan una tonalidad o resolución más baja de la esperada y no conocemos el motivo. Todo comienza con una correcta limpieza de nuestro objetivo, de las lentes y el resto de nuestra cámara con tal de obtener el máximo rendimiento y calidad fotográfica. Véase con un líquido especial y un trapo microfibra para limpiar en movimientos circulares nuestro espejo y objetivo, sin arriesgarnos a utilizar productos de dudosa efectividad. También puedes ayudarte de los kits de limpieza de lentes que a veces acompañan la cámara. Todo empieza con la limpieza.
Cercanía
La proximidad a nuestro objetivo siempre será un aliciente para obtener buenas instantáneas. Utilizar el zoom de la cámara o smartphone es un buen primer paso. En el caso de querer fotografiar locales o atracciones más "privadas", basta con interactuar con el sujeto, quizás charlar un rato y tendremos la captura deseada. En esta característica cobra especial importancia el respeto hacia el objetivo a fotografiar, pues al igual que a nosotros no nos agradaría que un turista nos fotografiase como atracción local, nosotros debemos correr las mismas molestias. Siguiendo esta premisa podremos tener una instantánea luciendo ese velo árabe en una tienda, a un grupo de mujeres indias vistiendo sus saris o al típico campesino que trabaja en los arrozales chinos.
La importancia de la luz
Muchas veces nos dejamos llevar más por el escenario a fotografiar que por las mismas condiciones que lo rodean. Podemos encontrarnos frente a un gran mausoleo, en un mercadillo bullicioso o frondosos bosques pero nos olvidaremos de un componente importante: la luz. Y es que la luminosidad condiciona siempre las fotografías, sea cual sea el filtro o la distancia mantenida con el objetivo, de modo que lo mejor será elegir el momento oportuno del día o una perspectiva que permita algo de sombra o una captura más óptima.
Improvisación
Sugerimos a nuestros hijos que se coloquen frente un importante monumento, sonrientes y erguidos. Podemos obtener una bonita instantánea pero tampoco estará de más tender una mano a la improvisación. ¿Qué tal capturar a nuestros hijos riendo y jugando con la Torre Eiffel de fondo? ¿ O a nuestra pareja tomando el sol en la más bella playa mientras nosotros volvemos de agarrar un cocktail del chiringuito? La improvisación provee siempre más naturalidad en nuestras fotografías, además de unas cuantas risas con nuestros compañeros.
Sé creativo
La mayoría de postales souvenirs son fotografías standard de las atracciones turísticas que solemos emular con éxito. Tomar una fotografía de un lugar, sin mayores alicientes o complementos no está mal, pero debemos tender una mano a la creatividad, a una perspectiva diferente o añadidos espontáneos. ¿Por qué no capturar el Taj Mahal desde el arco que lo precede al entrar al recinto? ¿O un atardecer caribeño a través de las palmeras? ¿Quizás el cartel de una pizzeria con la Fontana de Trevi de fondo? Combinar elementos locales, modificar nuestra posición o elegir el momento ideal del día son características propicias para tener instantáneas frescas y creativas.
Descartes
Tomar varias fotografías de un mismo escenario es lo más recomendable para saber cuál es la apropiada y qué efectos debemos cambiar o añadir. También es algo usual tomar la máxima cantidad de fotografía para darnos cuenta que ninguna sobresale. ¿Por qué? Por ese pensamiento acerca de capturar todo lo posible, quizás con rapidez y poca delicadeza. Si realmente te interesa fotografiar un determinado lugar, toma varias fotos, descarta, experimenta y tómate tu tiempo para conseguir la mejor toma en lugar en vez de andar durante todo el viaje fotografiando todos los elementos por el simple hecho de conservar en tu tarjeta hasta el último detalle de un destino.
Estas tips para mejorar tus fotos de viaje hacen especial hincapié en elementos como la luz, la constancia y, especialmente, una cierta creatividad. Recordemos que un nuevo destino siempre ofrece características diferentes, otros pensamientos y escenarios que merecen ser descubiertos con inocencia y fotografiados con respeto. Pues muchas veces, el objetivo no nos permitirá ver lo aquello que hemos venido a visitar.
¿Cuál es tu particular truco para mejorar tus fotos de viaje?