
Mira la foto de arriba: ¿no te dan ganas de estar allí, nadando o haciendo la plancha en ese mar celeste? Creo que nadie se negaría al placer de un día paradisíaco en Palaos, una isla secreta y escondida en la región de la Micronesia del Océano Pacífico.
Después de varios años bajo la soberanía de los Estados Unidos, hace poco que Palaos se convirtió en una nación independiente y por ello es uno de los países más jovenes del mundo. Pero que tenga pocos años no quiere decir que tenga poco para ofrecer a sus turistas...

Con un paisaje así no necesita nada más para ser un imán de visitantes de distintas procedencias. Realmente vale la pena cruzar el mundo para visitar la ciudad de Koror, uno de los centros turísticos de Palaos con numerosos hoteles, resorts y hostales para disfrutar del sol y la playa. También es el lugar indicado para practicar buceo y conocer sus impresionantes arrecifes, aunque recomendamos el mayor de los cuidados, pues los tiburones habitan las aguas celestes de esta isla.
Palaos es un destino turístico inigualable, que ofrece naturaleza y lujo al mismo tiempo. Un lugar escondido y secreto para alejarnos de la rutina y desaparecer del mundo por un rato, pero lo suficientemente cerca de la sociedad por si necesitamos algo.