
Bután es un destino de otro mundo, donde puede contemplarse las tradiciones budistas mezcladas con algunos toques de modernidad, pero que no quitan el encanto y misticismo que siempre han caracterizado a este pequeño pero elevado país. A continuación te comentamos algunos lugares y costumbres de Bután.
El takin: animal nacional de Bután

Derivados de la mezcla divina de una vaca y una cabra realizada por uno de los 15 santos budistas, según cuenta la leyenda local, el Takin se ha convertido en el animal nacional de Bután, desde que en 1990 el rey Jigme Singye Wangchuck concediera la plena libertad a todos los ejemplares de esta especie que se encontraran en el reino.
Por ello no es raro recorrer el montañoso estado de Bután y toparnos a cada momento con carteles diciendo “no molestar a los animales” ¡y esperamos que no lo hagas! Pero no por ello dejes de fotografiar a estos singulares animales que tanto significan para la cultura de este pequeño país asiático.
La artesanía tradicional en Thimpu
El Instituto Nacional de Thimpu de Zorig Chusum es un lugar de visita obligado si se quiere apreciar la rica cultura local, pues allí se enseña a las nuevas generaciones el arte de producir las artesanías tradicionales, unas exquisitas tallas en madera que abarcan desde toda la fauna de Bután, como conejos, serpientes, bueyes, venados, leopardos, tigres y figuras mitológicas como el dragón o el ave Garuda, hasta las típicas mascaras pintadas que se utilizan en los tsecus, o festivales religiosos.
El arte antiguo del tiro con arco
El tiro con arco es todo un arte en Bután, por lo que practicar este deporte es una de las cosas que seguramente debes hacer, y por la que serás muy bien considerado por los locales si lo haces bien, pues en este país se admira a los verdaderos guerreros.
De otra forma, Steven Seagal no hubiera sido considerado la reencarnación de un monje del siglo 13, y proclamado como uno de los actuales héroes de Bután. Parece loco, pero es así. Por lo que ya sabes, si tiras bien con el arco, seguramente se te abran todas las puertas de Bután.
Templo de la vida
El Goemba tango, o Templo de la Vida, es una de las principales maravillas de Bután, aunque su llegada a él no es de las más fáciles, pues tendremos que ascender por la montaña y enfrentarnos al cada vez más reducido oxigeno, pero una vez que logremos llegar, seguramente los maravillosos paisajes que se aprecian desde lo alto serán suficiente para recompensarnos por el esfuerzo.
Aquí se podrá apreciar la esplendida arquitectura budista, con las suntuosas esculturas doradas de buda, y vislumbrar algo de la educación monástica del budismo, desde las ancestrales enseñanzas del Iluminado, hasta los intrincados partidos de fútbol que se forman en los recreos.
Solo tienes que explorar el Reino e las Nubes para conocer sus pintorescos y contrastantes encantos, donde la religión aun tiene una fuerte presencia en la vida diaria y el amor por las tradiciones se sucede de generación en generación.
¿Alguna vez has visitado este felíz país? ¿Qué nos recomiendas?