En el noroeste argentino se sitúa la maravillosa Quebrada de Humahuaca. Un angosto valle andino de unos 150 km de extensión, rodeado íntegramente por altas cadenas montañosas y surcado por el Río Grande.
Un fabuloso accidente geográfico jujeño, ubicado a unos 2.000 metros de altura sobre el nivel del mar, que durante el siglo XVI fue el camino de entrada de los colonizadores españoles al actual territorio de Argentina.
Por su carácter único en el mundo y su extrema belleza paisajística, fue incluída en el año 2003 en la lista de Patrimonio Cutural y Natural de la Humanidad de la UNESCO. Esta distinción le otorgó un lugar privilegiado en la oferta turística argentina, aumentando exponencialmente el número de visitas en la última década.
Los pueblitos que la rodean conjugan la historia y tradición de las comunidades originarias que habitaron la zona históricamente. Muchos de ellas (de hasta 10.000 años de antigüedad) a pesar de todas las presiones políticas y de capitales privados, logran mantenerse en pie, al igual que sus ritos y costumbres.
Volcán
Este poblado es el extremo sur de la Quebrada. Es precisamente donde las montañas abandonan sus colores verdes y se trasnforamn en cadenas serranas de colores ocres y marrones. La ciudad posee una fuerte dependencia de la actividad industrial, dejando un poco de lado al sector del turismo. Está muy vinculada a la explotación de recursos naturales, como las salinas y las vetas de plata, cobre, hierro y plomo. Un pueblo muy bello, puerta de entrada al valle.
Tumbaya
Este pueblito te ofrece, principalmente, los vestigios de la arquitectura colonial. Entre sus calles encontrarás, una iglesia que data del año 1796 y que en la actualidad fue declarada Monumento Histórico Nacional. Tumbaya se sitúa a lo largo del río Grande y al pie de de una línea de cerros de deslumbrantes colores. Al norte de Volcán, no puedes dejar de lado este lugar en tu visita a la Quebrada.
Purmamarca
Una de las comunidades más conocidas de la provincia de Jujuy. Cuando te pares en cualquier punto de Purmamarca y eleves tu mirada, tus pupilas se llenarán de siete colores. Es que la ciudad se ubica al pie del reconocido mundialmente Cerro de los Siete Colores, atractivo que seduce a turistas de todas partes del planeta.
Los 7 colores se dan a causa de los variaciones en las composiciones químicas de la tierra del cerro, que acompañados de las condiciones climáticas, conforman un paisaje inigualable.
Pero Purmamarca no es sólo el cerro, posee múltiples atractivos, tales como el Paseo de los Colorados, la Cuesta de Lipán y otro lugar fabuloso, Las Salinas Grandes. Sin dudas estamos ante un lugar al que deberás dedicarle más de un día de tu visita a la Quebrada.

Hornillos
Hornillos te ofrece una gran riqueza histórico-cultural, sin dejar nunca de lado toda la belleza del paisaje que predomina en la zona. Posee como principal atractivo al Museo Histórico, que contiene 12 salas con testimonios reales del pasado colonial. Otro sitio de interés es el Yacimiento Arqueológico, una serie de ruinas de piedra laja, que fueron un sistema de defensa en los tiempos de batallas.
Tilcara
Tilcara es un referente de la zona. Sin duda, es uno de los principales pueblos de la Quebrada. Desde el punto de vista turístico, es el que mejor infraestructura de servicios y accesibilidad posee, lo que contribuye a ser el principal destino de los turistas que visitan el valle.
Por la importancia del descubrimiento del Pucará, la ciudad es catalogada para Jujuy como la Capital Arqueológica. En su territorio se observa una gran cantidad de museos, ferias artesanales y, es aquí donde se celebran las famosas celebraciones del norte argentino: la Fiesta de la Chicha, la Pachamama y el Carnaval. El sector gastronómico también se merece una líneas, ya que la calidad de las comidas tradicionales que se ofrecen es excelente.
Todo el circutio compuesto por estos pueblitos, que bordea a la Quebrada de Humahuaca, es uno de los principales atractivos de la Argentina y el recorrido tiene como eje central a la ruta nacional N° 9. Te recomiendo que, a la hora de llegar al valle, tengas en cuenta la altitud.
Caminar con paciencia y no exigirte demasiado es importante para no apunarte (malestar ocasionado por la disminución de oxígeno). Teniendo en cuenta esto y con una buena planificación del recorrido, el disfrute de unas excelentes vacaciones está asegurado.