Cada uno de nosotros es un individuo irrepetible. Un ADN exclusivo, a menos de que se trate de gemelos idénticos, huellas dactilares únicas y líneas de las palmas de las manos singulares. Quizá también necesitemos nuestro régimen absolutamente personal para alcanzar ese peso corporal que tanto anhelamos.
Todo depende de tu balance energético
El cuerpo humano es una máquina compleja que opera con un combustible, que son las calorías aportadas por los alimentos y las bebidas. En el metabolismo basal (gasto energético mínimo en estado de reposo), un hombre de 21 años, de 1,80 de estatura, 100 kilos de peso y con hábitos sedentarios, quema cerca de 1000 calorías por día. Es muy probable que este chico esté ingiriendo más de las 2500 calorías/día que recomienda la OMS. Con seguridad, de no tomar medidas, la tendencia de su peso será al alza.
Ya no hay disculpas que valgan. Desde un dispositivo móvil o un ordenador clásico, puedes acceder a un programador de dietas en línea, que tiene la ventaja de estar avalado por los departamentos de Salud y Alimentación del gobierno estadounidense. Fue puesto en servicio recientemente por los National Institutes of Health (Institutos Nacionales de Salud) de Estados Unidos.
Lo primero que debes ingresar al sistema es tu peso, sexo, edad y estatura. Las variables de peso y estatura puedes indicarlas en el sistema métrico o en el inglés. A continuación, el programa te calcula un Índice de Actividad Física personalizado preguntándote qué tan activo eres en el trabajo o la escuela, y en tu tiempo libre.
Si el joven de nuestro ejemplo marcó una actividad muy ligera ( very light) en ambos campos, su Índice de Actividad Física será de 1.4. La segunda pantalla del sistema interroga sobre el peso objetivo y el número de días en que deseas alcanzarlo (también se dispone de una opción de una fecha objetivo). Supongamos que nuestro individuo de 100 kilos quiere llegar a 85 kilos en 6 meses (180 días).
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La pantalla de los sacrificios
Hasta ahora todo ha sido comodidad. En la tercera pantalla comienzan los verdaderos esfuerzos. Tienes que indicar qué tanto deseas cambiar tus hábitos sedentarios para bajar de peso o para no seguir incrementándolo. Asumamos que el joven del ejemplo, entre las distintas opciones presentadas, escoge una caminata intensa de 60 minutos, 5 días por semana. El sistema le informa que ello significa un cambio en su nivel de actividad física del 54%.
La cuarta pantalla es la de los resultados. Este joven en particular, debe ingerir 2836 calorías al día para mantener su peso de 100 kilogramos y tendría que bajar a 2289 calorías al día para alcanzar su meta de 85 kg en 180 días. Obviamente, mantenerse en 85 kg supone conservar su programa de ejercicios. Puedes jugar y recalcular cambiando las variables todo lo que quieras, hasta alcanzar un plan que te deje satisfecho.
Finalmente, dispones del SuperTracker, un desarrollo del Departamento de Agricultura estadounidense para ayudarte a planificar los cambios de hábitos alimenticios, a objeto de que te mantengas en la ingesta calórica deseada.
Todo de lo más sencillo y bien servido. ¿Te animas?
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