Durante los últimos años, Internet se ha convertido en una particular agencia de viajes: consejos, compras o vídeos, una fiebre encarnada principalmente por los blogs de viaje. Muchos trotamundos han decidido plasmar parte de sus inquietudes y experiencias en este nuevo formato, si bien unos pocos pueden mantenerse económicamente con esta labor. Y nosotros nos preguntamos, ¿cómo puedo rentabilizar mi blog de viajes?
Consejos básicos para comenzar un blog
En primer lugar, debemos saber qué queremos. Muchas personas no saben muy bien cómo enfocar el contenido de un blog, algo que queda reflejado en sus entradas o diseño, despistando a usuarios que, posiblemente, denieguen volver a visitar nuestro espacio. Es por ello que es muy importante conocer la idea principal: sobre qué queremos escribir, de qué modo y hacia qué público.
Una vez tenemos clara la idea, lo mejor será dar forma a nuestro blog mediante plataformas como el aliado de Google, Blogger (ideal para inexpertos) o Wordpress (más profesional). Tantear widgets, elegir el contenido, fijar los índices, etc... básicamente dar una imagen a nuestro blog. Lo siguiente será escribir la primera entrada. Cuidar la ortografía, ser conciso y, ante todo, un buen material fotográfico nos ayudarán a dar forma a nuestro primer golpe como escritor online.
Otro de nuestro grandes aliados a la hora de escribir un blog será el SEO, cuya correcta ejecución nos permitirá colarnos en gigantes como Google, de modo que será mejor ahorrar títulos retorcidos o demasiado subliminales, pues la esencia de ese mismo contenido sera el que buscaran los usuarios del modo más resumido.
Obviamente, el SEO no nos hará todo el trabajo, siendo nosotros los que compartamos nuestras entradas y fomentemos el blog en redes sociales como Twitter (donde no estaría mal crear una cuenta propia para el blog), Facebook (dónde también tenemos la posibilidad de realizar económicas campañas para llegar a usuarios interesados), Google+ (cuyos "círculos" ofrecen un amplio margen de posibilidades) o LinkedIn, siendo esta una red de usuarios mucho más interesantes, incluyendo una larga lista de empresas y profesionales turísticos.
Pasión y esfuerzo
Lo que viene a continuación se define en esfuerzo y dedicación. El resultado de estos primeros pasos nos llevarán a mantener o cambiar nuestra estrategia. Roma no se construyó en un día, de modo que nuestra labor será mantener una cierta regularidad en la publicación de entradas (2 mínimo por semana, pero tampoco sin saturar el blog), más promoción, quizás vincularte a otro blog más especializado para exportar seguidores, incluir la firma del mismo en mensajería de Outlook o Gmail... Todo vale.
El momento en el que se puede replantear economizar un blog es aquel en el que mantienes una cantidad de usuarios o suscriptores fijos y regulares, alimentados por nuevas y mejores entradas. En este momento podemos optar por la opción de incluir publicidad de Google Adsense, o bien incluyendo enlaces del programa eXponsor; estas empresas pagan en base a los clics o impresiones diarias de la página. Muchas otras veces, las empresas turísticas interesadas en tu blog pueden ofrecer donaciones con tal de obtener promoción o también puedes vender (o sugerir)productos como tu e-book, fotografías o material importado.
Rentabilizar tu blog viajero es una tarea que requiere de esfuerzo y dedicación, quizás algo de picardía y creatividad pero siempre cuidando a nuestros seguidores y colaboradores. No te dejes engañar por ciertos tutoriales ni tampoco pretendas convertirte en millonario con tu blog. Quizás, simplemente se trate de un primer paso para acceder un mundo que ofrece infinidad de posibilidades.
¿Has conseguido rentabilizar tu blog de viajes?