Ubicada en Suiza, Basilea es la tercera ciudad más grande del país, con aproximadamente 160.000 habitantes. La característica más importante que tiene esta bella ciudad es que en ella se sitúa la frontera de Suiza con Francia y Alemania y, por esto, algunos suburbios de Basilea se encuentran en aquellos países.
Gracias a esto, la ciudad refleja cualidades culturales y herencias de los tres estados, y es una visita de maravillas para todo turista.
Tres culturas en un solo lugar
La economía de Basilea se apoya casi exclusivamente en las industrias químicas y farmacéuticas, aunque a veces es un peligro por su cercanía con el río Rhin y los desperdicios tóxicos que estas empresas producen. La ciudad recibe el nombre además de Regio TriRhena, nomenclatura dada para reflejar las herencias de los tres países que la conforman.
Además, en Basilea se ubica la Universidad más vieja de toda Suiza, y tienen su propio dialecto: el alemán basileno.
Como era de esperarse, Basilea es uno de los centros culturales más importantes de todo el país. La ciudad tiene un gran número de teatros y muchos museos, incluyendo el Kunstmuseum Basel, la colección de arte más antigua del mundo (accesible para el público). Dentro de este museo podemos encontrar obras de artistas suizos además de artistas internacionales diversos como Picasso, Juan Gris, Andy Warhol y Fernand Léger.
Centro de fantasía y festejo
Para aquellos amantes de la música y el teatro, la ciudad es hogar del Schola Cantorum Basiliensis, un centro de investigación y representación musical fundado en 1933, especializado en melodías de las eras Medievales y Barrocas.
El Teatro de Basilea tiene muchas en obras en cartelera continuamente, y allí se pueden ver performances por el ballet y la ópera de Basilea. Además, en la ciudad se encuentra la orquesta más grande de todo Suiza, la Sinfonieorchester Basel y, en menor escala, la Kammerorchester Basel, que recientemente grabó todas las sinfonías de Ludwig van Beethoven para Sony.
Durante Febrero y Marzo se lleva a cabo en la ciudad el Basler Fasnacht, el carnaval más grande del país, que atrae a muchísima gente de todos los países cada año, por más que corra con la desventaja de comenzar a las cuatro de la mañana en punto en pleno invierno. Este evento celebra la historia protestante de la ciudad al comenzar cinco días antes del Miércoles de Cenizas y proseguir la celebración por exactamente 72 horas sin descanso.
Por esto también se considera al carnaval como un feriado, ya que los comercios no abren y los niños no tienen clases esos días.
Aquellos fanáticos de las ferias y festivales encontrarán su lugar ideal en la fantástica Basilea.
¿Les gustaría visitar Basilea? ¿Qué les parecen sus sorprendentes características?