La famosa ciudad de Avignon, en Francia, conocida mundialmente por la canción infantil dedicada a su antiguo puente (el Pont Saint-Bénezet, del que quedan sólo 4 de los 22 arcos originales) y por haber sido sede del papado en épocas históricas difíciles, conserva aún todo ese pasado que nos muestra como salida de un libro de cuentos, con sus techos de tejas rojas y sus torres. Si están pensando en disfrutar de unas vacaciones en Francia, les propongo conocer algunos detalles más sobre la ciudad de Aviñón.
Pasado y presente de Aviñón
Está situada en la región francesa de la Provenza-Alpes-Costa Azul, en la confluencia de los ríos Ródano y Durance, Departamento de Vaucluse, y se divide en cuatro cantones nombrados según los puntos cardinales. Pero aunque sus viejos tesoros arquitectónicos hayan sido incluidos en la lista del Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, en el año 1995, la ciudad trata de que los visitantes no lleguen sólo por ver su pasado sino que dsifruten también su interesante presente; cada año se celebra allí un importante Festival Internacional de Teatro y distintas muestras itinerantes arriban a sus ricos museos.
El conocido como Palacio de los Papas de Aviñón, fue adquirido por el Papa Clemente VI a la Reina de Sicilia, Juana I, y perteneció al Papado hasta que se produjo la Revolución Francesa. Es la construcción gótica más grande de la época medieval, dado que ocupa unos 15.000 metros cuadrados; con sus imponentes muros de cinco metros de ancho se asienta en una prominencia rocosa que se eleva a unos cien metros sobre el nivel del mar, en la parte norte de la ciudad.
El Río Ródano y su isla
El conjunto edilicio lo conforman dos palacios, el Viejo que hiciera construir el Papa Benedicto XII y el Nuevo que mandó erigir Clemente VI, ambos durante el siglo XIV; en la actualidad todo el complejo funciona como museo. En el lugar están también el Pequeño Palacio de los Arzobispos y la Catedral de Notre-Dame-des-Domes. Antes el Puente de Aviñón cruzaba hasta la Isla de la Barthelasse pero hoy es navegando que se accede a ella, desde allí se tiene una hermosa vista de la antigua ciudad a un lado y del barrio residencial de la Villeneuve-lez-Avignon del otro.
Si quieren viajar en tren, el TGV Mediterráneo la comunica en tiempo récord con las principales capitales. La línea de alta velocidad que viene desde París y Lyon se divide aquí en dos, un ramal parte hacia Nimes, Montpellier y España y el otro va hacia Marsella, Niza e Italia. Pero no podemos partir sin haber probado el exquisito Châteuneuf du Pape, vino de carácter fuerte y sabor amaderado, que se viene produciendo desde hace siglos gracias a las más de 3.000 hectáreas cultivadas de vides. Aviñón es tradición y modernismo, bellos paisajes y cultura, todo en ella es agradable y los días pasados en su entorno tienden a ser inolvidables.
¿Conocen la ciudad de Aviñón? Sin dudas, es otro de los lugares turísticos fuera de París que debes visitar.