
Tijuana, Baja California, está situada literalmente en la esquina noroeste de México, y colinda con Estados Unidos y el océano Pacífico.
Aunque no es el lugar más bello, vivir ahí tiene muchas ventajas. Estas son algunas:
Tienes playas para relajarte

Yo soy costeña pero mi concepto de playa era muy diferente al de las playas de Tijuana, donde debes reemplazar el bikini por chamarras y los juegos de pelota por puestas de sol.
Mientras que una playa en la costa sur del país es sinónimo de diversión y altas temperaturas, las playas de Tijuana son para relajarse y escuchar las olas del mar mientras tomas un chocolate caliente.
Lo mejor es que si quieres algo más de acción puedes disfrutar de un concepto totalmente diferente del lado de California, pues basta con avanzar unos 30 minutos desde el cruce para convivir con chicas en patines, jóvenes haciendo pesas, helados de tres pisos, voleibol de playa y parrilladas en las casas con vista al mar.
Es un punto estratégico
Otra cosa que disfruté mucho de Tijuana es que puedes conocer sus alrededores fácilmente. Por ejemplo, Playas de Tijuana se encuentra a 30 minutos del centro; si sigues, te encuentras con el pueblo de Rosarito y a una hora y media está Ensenada, con La Bufadora y sus barrancos.
La Carretera Escénica tiene una de las mejores vistas en todo el país.
La verdad es que estos lugares son muy turísticos y tienen de todo: restaurantes, hoteles, antros, casas de descanso, mercado. De hecho, aunque seas mexicana, te sentirás como en otro país con tanto extranjero a tu alrededor.
Hay mucha actividad
La vida en Tijuana nunca es aburrida y no, no hablo precisamente de la diversión nocturna, sino que al ser puerta de entrada a uno de los países más grandes, la afluencia de personas de todo el mundo enriquece el lugar.
Aquí la cultura estadounidense y la mexicana se mezclan. Por ejemplo, en Tijuana la preferencia al peatón es muy marcada, los restaurantes son muy americanos y puedes pagar con dólares en todos lados o hablar spanglish.
Sin duda debes probar la comida típica, incluidos los deliciosos tacos de pescado.
Vives un clima templado y un frío navideño
Tijuana tiene un clima muy agradable; es caliente en verano pero no te sofocas.
En general predomina el clima templado, pero en invierno el frío te obliga a usar doble calcetín. Esto es muy bonito en Navidad, porque puedes disfrutar de una decoración natural en las casas con hielo.
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Por lo regular, el día comienza a las 06:00 horas con la salida del sol, mismo que se oculta a las 16:00 o 17:00.
Si no estás acostumbrada, puede ser un poco tétrico, ya que en invierno la neblina invade las calles, pero esto mismo permite que los horarios de trabajo sean más cortos y tengas la noche para turistear.
Estás a un paso de EU
Y lo más interesante: vivir en Tijuana te permite visitar Estados Unidos tantas veces lo desees.
Una vez del otro lado, las opciones son infinitas. Primero te recomiendo San Diego y luego Chula Vista o la Isla Coronado.
Renta una bicicleta para pasear por el pabellón, visita los centros comerciales y súbete al ferry. Si te da mucha nostalgia, incluso puedes irte al mercado mexicano a comer tamales.
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Quienes viven en la frontera pueden disfrutar lo mejor de dos mundos, la televisión abierta me permitía ver Oprah y Friends en su idioma original, por ejemplo.
Te sientes curioso por asomarte a otro país pero con la seguridad de aún estar en tu tierra. ¡Lánzate a la frontera!