Cuando somos viajeros experimentados ya conocemos algo más los mecanismos y medidas para evitar ciertos disgustos. Sin embargo, para las personas que recién comienzan a abrirse al mundo, les recomendamos seguir algunos de estas 5 cosas a evitar en un primer viaje pues, en ocasiones, nada es lo que parece.
#1 Llevar mucho equipaje
Si vamos a viajar a un destino nacional durante pocos días, no debemos dejarnos llevar por ese impulso repentino de cargar medio armario con nosotros, no sólo por comodidad un vez lleguemos al destino, sino por las sorpresas que puede depararnos antes de pisar el avión. Precios altos por kilos de más, líquidos fuera, reordenar la maleta en la terminal y otros muchos episodios estresantes pueden sucederse antes de emprender tu travesía.
#2 Beber alcohol
Las azafatas están acostumbradas y los viajeros experimentados también, pero si es nuestro primer viaje aún no habremos experimentado los efectos de ciertos vuelos y el consecuente jet lag. La abstinencia de alcohol durante los días previos al vuelo es obligada con tal de no fomentar aún más los desajustes de un vuelo especialmente largo, si bien los taponcillos para los oídos nos ayudarán a sobrellevar ese primer y desagradable golpe de tímpanos por la diferencia de alturas.
#3 Llegar a destino en la noche
Si se trata de nuestro primer viaje, llegar de noche a un nuevo destino no es lo más recomendable. El estrés del viaje nos hará sentir mucho más débiles al caer la noche y quizás no entremos en el bus adecuado, estemos algo confusos para encontrar un hotel tras defendernos en las terminales o seremos víctimas de los muchos avispados que, especialmente en países no occidentales, siempre tienen un taxi dispuesto a llevarte a un lugar poco deseable o confundirte para poder vender algo de su mercancía.
#4 No contratar un guía
Si nunca salimos de nuestra localidad y es nuestra primera visita a una gran ciudad europea, por ejemplo, posiblemente malgastemos tiempo viendo demasiadas tiendas, buscando souvenirs y confundirnos al trazar una ruta para visitar las atracciones turísticas. Contratar un guía local, especialmente aquellos que orquestan los llamados free tours, no sólo nos ahorraran tiempo y dinero en subtes innecesarios, sino que nos mostrará el encanto de la ciudad de un modo más práctico y dinámico. Optar por contratar paquetes de excursiones también será una buena opción.
#5 No contratar un servicio de internet
Los smartphones cada vez están más arraigados a nuestra rutina cotidiana y puede ser una herramienta útil durante nuestro viaje: descargar mapas, leer opiniones de un restaurantes, utilizar apps milagrosas o hablar con los seres queridos que quedaron en nuestra ciudad. Es por ello que no debemos infravalorar las altas tarifas de telefonía cuando viajamos al extranjero, de modo que la búsqueda de wifi en nuestro hotel u otros puntos o la contratación primordial de un servicio de datos extranjeros serán aliados útiles si no queremos pagar 200 euros tras 5 días en Marruecos o 500 dólares tras un mes en un país oriental.
Estos consejos para un primer viaje parten de premisas sencillas y cotidianas, pequeños detalles que en un primer momento pueden parecernos insignificantes pero que nos ayudarán a ahorrar dinero, tiempo y malos disgustos. Igualmente, los otros viajes que vendrán nos ayudarán a ser más experimentados.
Sigue estos consejos para planificar un viaje corto y para empacar lo necesario sin cargar de más.