
Probablemente Bruselas, la capital de Bélgica, sea de esas ciudades que tienen muchas cosas con las que conquistarnos en un viaje de vacaciones.
Sin embargo, además de su increíble Grand Plaz, de sus calles empedradas, de los monumentos de las diferentes etapas históricas que conviven en su centro, o de sus estatuas, Bruselas es también gastronomía. Y de ella queremos hablarte hoy en nuestro rumbo con su mayor exponente: la cerveza. Hoy te recomendamos 3 cervecerías que no puedes perderte en Bruselas.
A La Mort Subite
Es probablemente la más famosa de Bruselas. Desde luego, el nombre asusta bastante, porque eso de la muerte súbita no creo que guste a muchos. Sin embargo, su éxito se debe a la gran cantidad de cervezas en carta y a disponer de algunas de las de mayor graduación. Eso sí, éstas se las dejamos mejor a los más valientes, y que además, no lleven el coche.
Abre todos los días desde por la mañana hasta la 01:00 de la mañana. Está en Rue Montagne-aux-Herbes Potagères 7.

Delirium Café
Si la anterior se hizo famosa por su posición, por su nombre y por su carta, en este caso esta cervecería de Bruselas también tiene lo suyo. En su carta nos encontramos con nada menos que 3162 cervezas diferentes. Y eso ha hecho que forme parte del récord de los Guinness.
En este caso, puedes elegir visitar esta particular cervecería desde el mediodía hasta bien entrada la madrugada. Abre hasta las 04:00, a excepción del domingo. Está situada en Impasse de la Fidélité 4.
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Au Bon Vieux Temps
Aunque no tenga las características de las anteriores, esta cervecería belga también tiene de qué presumir. De hecho, cuenta con más de 300 años de historia desde que se fundó. Su carta de cervezas tampoco defrauda y el ambiente de una antigua taberna gusta a muchos.
Para encontrarla abierta hay que visitar Impasse Saint Nicolas, 4, su Rue Marché Aux Herbes en horario de tarde.
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Son muchas las opciones de cervecerías que nos ofrece Bruselas para divertirnos y para disfrutarla, pero está claro que cualquier visita a la ciudad debe incluir obligatoriamente una cata de cerveza, porque por la variedad que tienen, incluso los que no gustan de ella acaban saboreándola con sorpresa porque acaba por convencerles. En ese caso, se recomienda la de sabores.