Al noroeste del estado de Wyoming, EE.UU., se encuentra ubicado un lugar excepcional: Yellowstone. Este parque es el más antiguo del mundo y en él crece y se desarrolla la vida salvaje, núcleo de un hábitat natural de gran valor para nuestro planeta. Está considerado Patrimonio de la UNESCO y Reserva de la Biosfera.
En Yellowstone se localizan géiseres y aguas calientes que le dan singularidad a la región, pero también es hogar de muchos tipos de ecosistemas, dentro de los cuales destaca la diversidad de mamíferos, tales como: osos, ciervos, alces, coyotes, bisontes, etc. Cientos de aves, insectos y peces habitan allí, muchos de ellos en peligro de extinción.
La vegetación es muy rica, líquenes incluidos. Se cuentan árboles y plantas endémicas y muchas amenazadas. Las más comunes son el olmo, el álamo y el sauce, así como variedades de coníferas. En meses como mayo y septiembre florecen múltiples plantas, algunas raras que sólo viven en este parque, como la Verbena de arena, llamada así porque se desarrolla en suelos arenosos de las orillas.
Geográficamente el parque comprende lagos, montes, ríos, cañones, sierras, valles, cadenas montañosas. Se sitúa sobre una meseta y está rodeado de macizos montañosos pertenecientes a las montañas Rocosas, elevaciones de gran altitud. Como Yellowstone tiene un origen volcánico, es en realidad una caldera masiva. En él existe un bosque petrificado, que se considera uno de los mayores del mundo, cuyos árboles fueron sepultados por la ceniza convirtiéndose sus suelos en material mineral.
Debido a las alturas de la región, el clima en la zona es de montaña. Las estaciones están muy marcadas y cada fenómeno meteorológico discurre de acuerdo a la temporada actuante. En invierno las temperaturas son muy frías; sin embargo, en verano los días son cálidos. Las precipitaciones se asocian a horas del día y a sectores dentro de la reserva.
Aunque Yellowstone es un parque famoso que recibe cada año más de dos millones de visitantes y cuenta con una variedad de opciones para el disfrute del turismo ―campismos, lugares naturales que explorar, excursiones guiadas, hoteles, deportes de invierno―, en la reserva trabajan de manera estable y ocasional una serie de personas, cuya misión primordial es proteger el área de cualquier peligro externo.
La caza se prohíbe, solamente se permite en algunos bosques circundantes en un período específico que evita el abuso de los recursos naturales. Del mismo modo, es necesario solicitar permisos para la pesca. No se puede navegar en vehículos motorizados en muchos lagos, aunque hay un puerto destinado a los deportes acuáticos.
Todas estas condiciones garantizan la seguridad de ese gran ecosistema que es Yellowstone, resultando una luz de esperanza en este planeta cada vez más devastado por la explotación del hombre.