Tras un frío récord en EE. UU., las Cataratas del Niágara se congelan
Una ola de frío llegó a Estados Unidos y Canadá los últimos días del año 2017. Como consecuencia, las Cataratas del Niágara experimentaron un suceso poco usual pero fantástico: todo a su alrededor se congeló, e incluso, su agua pareció congelarse a medida que caía hacia el precipicio.
Todo alrededor de las cataratas está cubierto de nieve. Es un paisaje completamente blanco que, además, ensordece y enamora con el sonido del agua cayendo. Un agua casi congelada, como todo lo que está en su entorno, pero que no llega a ser completamente sólida.
El entorno de las Cataratas del Niágara es hermoso, ya sea en verano, primavera, otoño o invierno. Pero las imágenes que les regaló a los turistas este fin de año merecen ser difundidas, conocidas y admiradas. Un espectáculo blanco que, a pesar del frío, no deja de sorprendernos.
¡Las imágenes son fantásticas y permiten disfrutar de la belleza de la naturaleza en su máxima expresión!