Según este estudio, a quién odias depende de lo inteligente que seas
Si bien varios estudios han sugerido que las personas con menor capacidad cognitiva tienen más probabilidades de tener prejuicios, un nuevo estudio revela que tanto los niveles bajos de inteligencia como los altos, expresan niveles iguales de prejuicios, la diferencia radica en sobre quiénes tienen esos prejuicios.
Prejuicios e inteligencia
Los psicólogos sociales Mark Brandt y Jarret Crawford realizaron un experimento llamado: «Respondiendo a preguntas sin resolver sobre la relación entre la capacidad cognitiva y el prejuicio».
En la investigación analizaron 5914 individuos y midieron la cantidad de prejuicios presentes en grupos de mayor y menor capacidad cognitiva.
Para poder determinar la capacidad cognitiva de los participantes, utilizaron la prueba de vocabulario Wordsum que se correlaciona con el coeficiente intelectual del individuo.
Los investigadores encontraron que las personas de baja capacidad cognitiva tienden a tener prejuicios contra los grupos no convencionales o liberales, al igual que los grupos definidos por su raza, género u orientación sexual.
La tendencia se invierte en las personas de alta capacidad cognitiva, es decir que las personas más inteligentes tienden a tener prejuicios contra grupos considerados convencionales o conservadores.
Rechazando lo diferente
Brandt y Crawford concluyeron que las personas tienden a sentir antipatía y hasta odio por aquellas personas que son diferentes.
Esto sucede porque, para los expertos, anular a las personas con diferentes visiones del mundo puede ayudar a que las personas puedan mantener la validez de su propia visión del mundo, confiando en la perspectiva de uno mismo y creyendo que todas las demás visiones están equivocadas.
El estudio también reveló que las personas de baja capacidad cognitiva tienen prejuicios contra grupos de los que las personas no eligen ser parte, como los grupos étnicos o la comunidad LGTBI.
Sin duda esto refleja el hecho de cómo las comunidades conservadoras se muestran intolerantes, violentas y brutales contra las personas transgénero o los musulmanes, personas que nacieron así y que no tomaron la elección de ser diferentes.
Las personas con alta capacidad cognitiva, en cambio, sienten enojo hacia los grupos conservadores y aquellos que creen que pueden cambiar su visión o perspectiva de las cosas.
Es sorprendente ver cómo nuestros prejuicios están vinculados con nuestro coeficiente intelectual. La investigación podría ayudar a encontrar una mejor manera de evitar los crímenes de odio y fomentar la tolerancia, el respeto y las diferencias entre los individuos. ¿No crees?