
Todos sabemos que las estaciones del año son cuatro: verano, otoño, invierno y primavera. Cada una de estas estaciones se caracteriza por diferentes condiciones climáticas: el verano es caliente, el invierno es frío y el otoño y la primavera son estaciones intermedias.
Ahora bien, ¿ cómo se pasa de una estación a la otra? Seguro has escuchado sobre los solsticios y los equinoccios, ¿sabes qués son? Hoy concentrémonos en los solsticios.
¿Cuándo son los solsticios?

Cada año hay dos solsticios: el de invierno y el de verano. El primero indica el comienzo del invierno, mientras que el segundo indica el comienzo del verano.
En el hemisferio sur el solsticio de invierno sucede en el mes de junio y el de verano en diciembre. En el hemisferio norte es al revés: en junio es el solsticio de verano y en diciembre el de invierno.
En el hemisferio sur el invierno comienza a fines de junio y se extiende hasta fines de septiembre, cuando el equinoccio indica el comienzo de la primavera. El verano comienza sobre fines de diciembre y se extiende hasta fines de marzo, cuando el otro equinoccio indica el comienzo del otoño.
En el hemisferio norte es lo mismo, pero al revés: sobre fines de junio comienza el verano y se extiende hasta fines de septiembre, cuando empieza el otoño; y sobre fines de diciembre comienza el invierno y se exitende hasta fines de marzo, cuando empieza la primavera.
Muy bien, sabemos exactamente cuál es la función de los solsiticios pero, en definitiva, ¿qué son?
- Ver también: «¿Qué son los equinoccios?»
¿Qué son los solsticios exactamente?
Los días en verano son más largos, y en invierno más cortos: esto se debe a la inclinación de la Tierra sobre su propio eje. En pocas palabras: los solsticios son los días en que la inclinación de la Tierra alcanza su punto máximo, dando como resultado el día más largo (solsticio de verano) o la noche más larga (solsticio de invierno).
La fecha exacta en que esto sucede varía año a año, pero en general sucede cerca del día 21 o 22 de los meses de junio y diciembre.
Vayamos a un ejemplo para ver esto con mayor claridad. Situémonos en el hemisferoio sur y comencemos con el solsticio de verano, que sucede en diciembre.
El solsticio de diciembre da incio al verano, y es el día con mayor luz solar del año, por ello se dice que es el día más largo. A partir de este momento los días comienzan a ser cada vez más cortos.
La duración del día y la noche llega a igualarse en el equinoccio de marzo, y los días continúan acortándose hasta el solsticio de invierno, que sucede en junio, e indica el día más corto del año, que da inicio al invierno.
A partir del solsticio de invierno los días comienzan a ser cada vez más largos, se igualan con la noche durante el equinoccio de septiembre y continúan alargándose hasta el próximo solsticio de verano.
La palabra solsticio proviene del latín sostitium, significa «sol quieto», y es un término de la astronomía que se usa para describir la inclinación de la tierra respecto a la posición del sol.