Es común escuchar que muchas personas son alérgicas a algunos animales, y especialmente a la hora de tener mascotas les dificulta la tenencia de un perro o un gato.
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¿Puede ocurrir lo opuesto? Por lo opuesto no me refiero a animales que quieren adoptar humanos pero no pueden por motivos de salud, sino a que también las mascotas experimenten alguna clase de alergia ante la presencia de humanos.
Mascotas alérgicas
La respuesta es que sí.
Los animales pueden ser alérgicos a las personas, aunque no es muy frecuente.
Las alergias son provocadas por pequeñas partículas, desechos de piel o pelos que se desprenden de los cuerpos de todos los animales, incluyendo el cuerpo humano.
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Evidentemente, los humanos desprendemos mucho menos de esta clase de partículas, y también nos bañamos con mayor frecuencia que las mascotas (en la mayoría de los casos). En ciertas ocasiones, puede que un animal tenga una reacción alérgica debido a esta interacción con los humanos.
Del mismo modo, si un animal es alérgico a este desprendimiento de células de la piel o el pelo humano, también lo será respecto a otros alérgenos.
Por ejemplo, si tienes un perro y un gato, cualquiera de las dos mascotas podría tener una reacción alérgica ante la presencia de la otra.
En el caso de los perros, su reacción alérgica puede mostrar síntomas en la piel (inflamaciones, comezón) o en el hocico (goteos, estornudos). Los síntomas alérgicos de los gatos pueden manifestarse con sarpullidos en la piel, generalmente pequeás costras o pelo faltante en la zona de la cabeza y el cuello.
Las mascotas pueden ser alérgicas a cualquier cosa, igual que los humanos, pero también pueden ser fácilmente tratados de estas alergias por un veterinario.