¿Por qué se conmemoran las muertes de los próceres y no los nacimientos?
Los conocemos desde chiquitos, aprendimos sus historias en el colegio y hasta nos han hecho sufrir en más de una prueba de historia. Nos sabemos sus himnos de memoria, sus gestos heroicos y qué lugar ocupan en los billetes. Pero, ¿alguna vez te preguntaste por qué solo recordamos a los próceres en la fecha de su muerte?
Lo que en Argentina es una tradición establecida «desde siempre», en otros países resulta peculiar. Incluso en este mismo continente, se suele celebrar las fechas de nacimiento y no las de muerte de los héroes (o « paso a la inmortalidad», como le decimos oficialmente).
Son varias las explicaciones que hay detrás de esto. Una de las razones por la que se conmemora la muerte de los próceres, es que son las obras que hicieron en su vida las que acreditan su estatus, por ende no tendría sentido conmemorar su nacimiento dado que por entonces todavía no habían hecho ninguna obra trascendental para el país.
Por otro lado, ¿qué pasa con aquellos feriados que no conmemoran a un prócer, sino a un acontecimiento histórico? Un ejemplo de esto es el Día de la Bandera, izada por primera vez el 27 de febrero de 1812, cuya celebración es el 20 de junio (fecha de la muerte de su creador, Manuel Belgrano).
La razón detrás de esto estaría vinculada al calendario escolar. Es que algunas fechas (como los nacimientos) suceden en meses en los que los chicos están de vacaciones, por lo que se perdería la oportunidad de honrarlo en las escuelas. Esto es precisamente lo que sucede con el Día de la Bandera.
De esta forma, se conmemora el paso a la inmortalidad no como una fecha triste o de culto hacia la muerte, sino como la oportunidad de enseñarle a los chicos en esa etapa formativa la historia de algunos de nuestros héroes más importantes. ¿Ya lo sabías?
- No te pierdas: «El día que los nazis entraron a París con la Marcha de San Lorenzo»