Hoy en día todos quieren tener un gran televisor en su sala de estar. Cuanto más grande sea, mejor. Los televisores de plasma, LCD y LED han contribuido enormemente a que esto sea cada vez más deseado. Para poder tener una de estas pantallas gigantes sin que se requiera hacer el gran gasto que significa el televisor, inventaron unos lentes que permiten visualizar una pantalla gigante de 55 pulgadas. ¡Increíble!
Se llaman ITG-Vidix, aunque yo simplemente los llamo "lentes para ver una pantalla gigante". Tiene un lector de tarjetas de memoria SD y soporta hasta 32 Gigas. Con ello se pueden ver varios formatos de video. A su vez, trae incluido un explorador de internet y un reproductor de archivos multimedia.
Con estos lentes, se ve una pantalla de 55 pulgadas que parece estar a 6,5 pies de distancia, es decir, unos 2 metros de largo. Cuesta 279,99 dólares. Bastante menos que un televisor gigante. Eso sí, si quieres ver una película con tu pareja será bastante complicado. Deberán comprarse dos y, además, sincronizar el inicio del film. De lo contrario, los gritos aparecerán antes en una de terror y las carcajadas se nos anticiparán en las cómicas.