Nueva estafa en Gmail afecta a miles de usuarios: aprende a detectarla y protegerte

Los ciberdelincuentes ven en Internet el lugar ideal para aprovecharse de las personas y ahora una nueva estafa da vueltas por Gmail buscando víctimas.
Hoy te contamos sobre este ataque del tipo phishing que los expertos en seguridad califican como extremadamente realista, además de consejos para que te protejas y no caigas en él poniendo en riesgo la seguridad de tus datos personales.
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Nuevo ataque cibernético afecta a los usuarios de Gmail
Nuestros mensajes de correo electrónico están llenos de información sensible y los ciberdelincuentes buscan formas de apoderarse de nuestras cuentas siendo los ataques tipo phishing los más comunes.
Los usuarios de Gmail ahora se enfrentan ante una estafa cibernética extremadamente realista, tanto que personas con conocimientos técnicos cayeron en ella. Se trata de un mensaje que se supone viene por parte de un contacto y nos guía a una página idéntica a la que usamos para ingresar a Gmail.
Por supuesto que esa página es falsa y al ingresar nuestras credenciales de Google estas llegan a manos de los ciberdelincuentes, quienes además infectan tu cuenta reenviando el mensaje engañoso a todos tus contactos.
Este correo que ya afectó a miles de personas incluye un adjunto que hace que este sitio malicioso se abra en nueva pestaña del navegador. Tanto el mensaje como el archivo que trae son engañosos ya que el texto y título se basan en conversaciones que tuviste con la persona que los envió.
¿Cómo proteger tu cuenta?
Varias veces hemos hablado sobre los peligros de phishing, ataques maliciosos que mediante engaño hacen que las personas entreguen datos como nombres de usuario y contraseñas e incluso bancarios.
Es importante conocer las medidas básicas de prevención como por ejemplo tener activada la verificación de dos pasos y no abrir adjuntos que vengan en los correos, no importa que lleguen de parte de conocidos y que no estés esperando. Para saber si son verdaderos contacta a esa persona y pregúntale usando aplicaciones de mensajería o Facebook.
Si es que llegas a una página en donde te piden ingresar tus credenciales, siempre revisa la dirección de esta. Debe empezar con https:// y en la caja donde esté escrita se vea un candado que nos muestre que es un sitio seguro.
Siempre que entres a un servicio web escribe tú mismo la dirección y no lo hagas desde un enlace contenido en un correo o mensaje, ya que estos pueden enmascarar la URL falsa haciéndola ver muy similar a la verdadera.
Si crees que caíste en el engaño que ahora se distribuye por Gmail cambia tus contraseñas en todos los servicios web que utilices, además modifica las direcciones de recuperación que usas. Una vez que actives la verificación de dos pasos, cambia también la contraseña de tu cuenta Google.