(Nota: el bebé de la foto no es el recién nacido.)
Un hito muy interesante en medicina ocurrió en el día de ayer, y fue una noticia que recorrió el mundo y que continúa absorbiendo miradas en el día de hoy. Se trata del nacimiento de un bebé a partir de un embrión congelado hace 20 años, en un avance científico notable en lo que a técnicas de fertilización refiere.
Es el caso del hijo de una madre de 42 años, quien recibió el embrión congelado de una pareja estadounidense que lo donó en 1990, puesto que ya no deseaba tener más hijos al haber concebido su propio hijo mediante fertilización in vitro, decidiendo donar sus embriones a otras parejas que no pudieran concebir.
El hecho es que el bebé nació en mayo de este año (aunque la noticia se difundió recién ayer), y quienes se encuentran al frente de este logro notable son doctores de la Eastern Virginia Medical School, quienes reportan su trabajo en la revista Fertility and Sterility.
Al utilizar este sistema de congelamiento de embriones, las mujeres pueden preservar su fertilidad durante años, y de hecho los doctores creen que los embriones congelados pueden tener utilidad de hasta 55 años.
El récord anterior en tratamientos de este tipo ocurrió cuando una madre española dio a luz un bebé que había sido un embrión congelado durante trece años.
Por supuesto que los sectores conservadores debaten sobre cuán conveniente sería la adopción inter-generacional de estos bebés. Desde luego que es un debate ineludible, pero afortunadamente mientras algunos hablan la ciencia sigue avanzando y marcando hitos como este.