Liberación de delfines: los santuarios costeros terminarán con el cautiverio

Cada vez existe más conciencia acerca del sufrimiento de los animales en cautiverio en circos, zoológicos y acuarios. Justamente uno de estos últimos centros decidió liberar a sus ilustres prisioneros.
El Acuario Nacional de Baltimore anunció que los ocho delfines que tienen en exhibición dejarán el cautiverio para pasar a vivir en santuario dedicado a animales marinos y que se ubicaría en el mar Caribe.
Hace años que los encargados de este acuario buscaban formas de mejorar la calidad de vida de los delfines y entre las posibles soluciones estaban el crear piscinas más grandes y similares a sus hábitats naturales pero felizmente ganó la idea de devolverlos al mar, el lugar al que pertenecen.
Delfines encuentrarán su libertad

Los delfines están entre los animales más inteligentes del mundo y su capacidad para aprender rápidamente cosas nuevas es utilizada por los humanos para convertirlos en actores-esclavos que ejecutan trucos ante el público.
Tras la publicación de varios estudios científicos que hablaban del sufrimiento de estos animales en cautiverio, los expertos en biología marina y defensores de los delfines lograron lo impensado: uno de los acuarios más importantes de los Estados Unidos liberará a estos mamíferos marinos.
En total son ocho los delfines que habitan el Acuario Nacional de Baltimore; seis de ellos nacieron en este zoológico acuático y los otros dos fueron rescatados de derrames de petróleo o situaciones peligrosas.
Organizaciones de protección de vida acuática junto a los responsables del acuario hoy están en la tarea de crear un Santuario especial para estos delfines ya que no es cosa de llegar y liberarlos. Al estar tanto tiempo en cautiverio no saben vivir en un ambiente salvaje y están acostumbrados a ser alimentados por humanos.
Los encargados del proyecto creen que en 2020 estarían en condiciones de trasladar a estos ocho delfines a su nuevo hogar y mientras tanto seguirán en exhibición en el acuario, pero al menos sabemos que su condena al cautiverio no será de por vida y pronto obtendrán su tan merecida libertad en un santuario creado especialmente para sus necesidades y características y que se ubicaria cerca de las costas de Florida o en el Caribe.
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