La serie Star Trek hace uso de muchas tecnologías que hacen el show interesante. Algunas de estas están fundadas en teoría científica real, y otras son fantasía, pero a veces las diferencias son difíciles de identificar.
Una de las tecnologías es la creación de campos gravitacionales dentro de las naves espaciales; sin ellos, la tripulación estaría flotando dentro de la nave de la misma manera en la que los astronautas modernos lo hacen cuando están a bordo de la Estación Espacial Internacional.
Entonces, ¿ sería posible algún día crear estos campos gravitacionales? ¿o las escenas descritas en Star Trek están fundadas en pura ciencia ficción?
Hay tecnologías actuales que permiten levitar objetos en un campo gravitacional. Por ejemplo, es posible utilizar potentes imanes para hacer flotar objetos metálicos en el aire. En estos casos, los imanes están aplicando una fuerza en el objeto que se equilibra con la fuerza de gravedad. Ya que las dos fuerzas son iguales y opuestas, el objeto aparentemente flota en el aire.
En lo que respecta a naves espaciales, la manera más sensible utilizando tecnología moderna, es crear una centrífuga. Efectivamente, dentro de un anillo gigante que rota, los astronautas deberían ser capaces de ingresar a este anillo y sentirían la fuerza centrípeda creada por la rotación. Actualmente la NASA está diseñando estos artefactos para naves espaciales que podrían tomar misiones de larga duración. De cualquier modo, estos métodos no son lo mismo que crear gravedad, simplemente es una manera de luchar contra la misma. Crear un campo gravitacional artificial propiamente dicho es bastante difícil.
La manera de la naturaleza de producir gravedad es a través de la simple existencia de masa. Mientras que esto en sí mismo es un misterio aún para la ciencia, parece que mientras mayor cantidad de masa que algo tenga, la mayor cantidad de gravedad que ese objeto produce. Esta es la razón por la que la gravedad es mayor en la Tierra de lo que lo es en la Luna.
La teoría de la relatividad de Einstein predice que las corrientes de masa podrían producir ondas gravitacionales. Pero la masa debería estar rotando muy rápidamente, y el efecto final sería bastante pobre. Algunos científicos han afirmado haber llevado a cabo este tipo de experimentos y logrado resultados más allá de lo que es predicho por la teoría de la relatividad. De cualquier modo, estos resultados nunca han sido confirmados de manera concluyente.
Mientras que es teóricamente posible crear un campo gravitacional, hay poca evidencia de que se pueda realizar en una escala tan larga como para crear gravedad artificial en una nave espacial. Por supuesto, con los avances en la tecnología y un mejor entendimiento de la naturaleza de la gravedad, y sus leyes, esto podría cambiar en el futuro. Pero por ahora parece que utilizar una centrífuga es la mejor manera de simular la fuerza de gravedad.