Desde hace ya algún tiempo, Ubuntu utiliza Unity como el entorno de escritorio por defecto. Se trata de un entorno fácil de utilizar, sencillo y muy amigable para el usuario que recién comienza, pero que para muchos -entre los que me incluyo- no es suficiente.
Si es tu caso, afortunadamente los desarrolladores de Ubuntu han dejado muy fácil el camino para instalar entornos de escritorio alternativos. En este caso, veremos como instalar dos. Por un lado, Gnome, que antiguamente era el escritorio por defecto en Ubuntu y que, en la versión 3, integra funcionalidades bastante prácticas e interesantes.
Por otra parte, también veremos como instalar KDE en el caso de que no utilices Kubuntu y quieras probar este entorno.
Cómo instalar Gnome
Podríamos instalar Gnome 3 con un simple comando, pero no está del todo actualizado y no obtendremos todas las funcionalidades, así que echaremos mano de otro método que requerirá de tres comandos en la terminal.
Con la terminal abierta, ingresa estos comandos uno por uno.
- sudo add-apt-repository ppa: gnome3-team/gnome3
- sudo apt-get update
- sudo apt-get install gnome-shell
Si todo salió bien, reinicia el sistema y, en tu nombre de usuario (donde normalmente ingresas tu contraseña), te toparás con nuevas opciones. Escoge la que dice Gnome y listo. Gnome Classic, por cierto, es un entorno parecido al antiguo Gnome 2. Una vez que lo has instalado, puedes comenzar a sacarle jugo a cosas como las extensiones y los múltiples espacios de trabajo. Familiarizarse con Gnome 3 no es muy difícil, pero quien nunca usó el sistema operativo tal vez se encuentre un poco perdido, por lo menos en principio.
Instalando KDE
Kubuntu es una versión de Ubuntu con KDE instalado por defecto. Si en su lugar instalaste el Ubuntu tradicional, aún así puedes probar KDE de manera muy sencilla. KDE se caracteriza por tener un aspecto distinto y por permitir la personalización con widgets y una enorme cantidad de temas.
Sin más, para instalar KDE sólo necesitas abrir la terminar y escribir el siguiente comando.
- sudo apt-get install kubuntu-desktop
Una vez que termine, sólo es cuestión de reiniciar tu sistema y seleccionar KDE al arranque. El único problema es que, si usabas Gnome o Unity, las aplicaciones se mezclarán y podrías acabar con aplicaciones con menús de Gnome en un sistema KDE, algo que, si bien no afecta la usabilidad, no se ve del todo bien estéticamente hablando.
Si no te gusta Unity o sí, como a mí, te dio problemas de estabilidad o usabilidad, nunca está de más probar un entorno distinto. ¿Tú usas sistema operativo libre? ¿Qué tipo de entorno prefieres?