Femicidio triple en Mendoza: ¿Qué pasará con los hijos de la víctima?
El triple femicidio ocurrido en Godoy Cruz, Mendoza nos vuelve a movilizar, a preocupar, a indignar. Y nos deja un gran interrogante: ¿Qué ocurre con los hijos de una mujer asesinada en manos de un hombre violento? ¿Qué sucede cuando el asesino es su mismo padre? ¿Quién se hace cargo de ellos? ¿Quién es el encargado del sustento económico?
Para recapitular el caso, Daniel Zalazar Quiroga fue detenido por asesinar a puñaladas a la madre de su beba, Claudia Arias, a la tía de la mujer, Marta Susana Ortiz, y a su abuela, Vicenta Díaz, que convivían con ella y sus 4 hijos.
Otro caso de violencia de género que nos pide reacción ante semejante acción. En el acto, el presunto asesino, que niega haber cometido el crimen, hirió a su hija de 7 meses y a un nene de 11 años que están internados en el hospital pediátrico Humberto Notti de esa provincia.
Ahora, ¿qué pasará los hijos de Claudia?

El presente de los más chicos
Varias fuentes afirman que el hijo de 8 años de Claudia se escondió en el baúl de un auto y llamó a su abuela, la mamá de Arias, para avisarle lo que estaba pasando. Ella fue quien alertó a la policía según algunos testimonios. Ese día 3 de los 4 hijos de la víctima estaban presentes. La más grande se había quedado a dormir en la casa de una amiga.
Mientras el nene de 11 y la beba siguen internados, el de 8 y la nena están a cargo de su abuela.
"A partir de ahora comienza un proceso para ver cuál será el adulto responsable, obviamente que se está buscando el vínculo afectivo principalmente, eso es lo primordial para nosotros. Estamos esperando ver cómo sigue la salud de los dos niños que están en el Notti", informó Marcela Fernández, subsecretaria de Desarrollo Social, a Radio Mitre Mendoza.
Pero, ¿quién deberá y podrá hacerse cargo de estos chicos? ¿Quién deberá mantenerlos económicamente?
En muchos casos los niños y niñas cuya mamá fue asesinada quedan desamparados por el Estado, son separados de su hogares, dejan de vivir con sus hermanos e incluso hay casos en los que terminan quedando a cargo de los responsables o cómplices del femicidio de su madre.
Para resolver estos interrogantes surgió el proyecto de la Ley Brisa, cuyo objetivo es lograr una pequeña reparación a tanto dolor.
¿Escuchaste hablar de la Ley Brisa?
El pasado jueves 20 de octubre, se presentó el proyecto Ley Brisa en el Senado de La Nación. La iniciativa impulsada por La Casa del Encuentro y la Red Internacional de Periodistas con visión de Género de Argentina busca ayudar a los menores víctimas colaterales de los femicidios, que hoy no están protegidos por ninguna ley o que incluso son perjudicados por la misma.
Un ejemplo es el caso de Rosana Galliano, víctima de la violencia de género. Sus hijos hoy viven con la coautora del femicidio, la abuela de los nenes, y tienen prohibido relacionarse con la familia materna. Casos como este hay a montones.
La Casa del Encuentro contabilizó 2094 mujeres asesinadas por violencia de género en Argentina en 8 años. De los 2518 hijas e hijos de esas víctimas,1617 son menores de edad y puede que haya más ya que el dato se desprende de las cobertura mediática y muchas veces los hijos de la víctima no se nombran en los artículos publicados.
¿Por qué "Brisa"?
Ese es el nombre de una nena de 3 años con una historia que se repite con demasiada frecuencia. Su mamá Daiana Barrionuevo desapareció en diciembre de 2014 y su padre la había denunciado por abandono de hogar. Sin embargo, un mes después, fue encontrada asesinada y el hombre, detenido. La chiquita y sus hermanos gemelos de 7 años fueron a vivir con una tía y su abuelo paterno aunque ellos tienen pocos recursos económicos para mantenerlos.
El objetivo de la Ley Brisa es brindar una reparación económica equivalente a un haber jubilatorio mínimo, acceso a una cobertura de salud y a una vida digna. "Si bien un monto económico no reparara el gran daño que sufrieron, será de apoyo para que puedan continuar adelante con sus vidas. Porque una vida libre de violencia es posible y para ello debemos implementar todas las herramientas que tiene el Estado para hacerlo realidad", explicaron desde la organización.
Según el informe de la línea telefónica 144, el 52% de las personas en situación de violencia convive con su agresor. Esto representa un factor de riesgo grave y, en el 77% de los llamados atendidos, había niños presentes que se veían involucrados o afectados.
Cuando hay violencia en un hogar, los chicos también lo padecen pero, ante un femicidio, ellos quedan desamparados y desprotegidos. Aún hay que esperar para saber en efecto cómo será el futuro de los hijos de Claudia. Mientras tanto, apoyemos la Ley Brisa y contribuyamos al reconocimiento de los derechos de los hijos de las víctimas de violencia de género.