El 2 de julio de 2013 el mundo perdió a uno de los padres de la tecnología moderna. Una pérdida comparable, en todo sentido, a la muerte de Steve Jobs porque sin los desarrollos de Douglas Engelbart, ni el fundador de Apple ni Bill Gates hubiesen tenido sustento tecnológico sobre el que apoyarse.
La noticia llegó por medio de un correo electrónico enviado por su hija Christina pero, aunque lamentable, se trataba de una noticia más o menos esperada. Ya desde unos meses atrás, Douglas Engelbart batallaba duro contra su salud y una falla de riñón finalmente lo derrotó en su casa de Atherton, en California, a la edad de 88 años.
¿Quién fue Douglas Engelbart?
Para tener una idea de quién fue este hombre gigante que facilitó el trabajo de otros grandes personajes de la informática como Steve Jobs o Bill Gates, piensa en el objeto desde el cual estás leyendo este artículo.
Puede ser un ordenador de escritorio, una laptop, una tablet o un smartphone. Todos esos dispositivos tienen algo en común y es que poseen ventanas y botones que permiten activar otros programas. Pues bien, ese concepto al que llamamos “interfaz gráfica” fue una idea que Douglas Engelbart y su equipo desarrolló entre 1964 y 1968 para el Stanford Research Institute. Y aunque la mayoría de sus colegas en Stanford se reían de él por considerar sus ideas extremadamente excéntricas, Engelbart creó los dos elementos clave que definirían, en menos de dos décadas, el desarrollo de la informática hogareña.

Inventos de Douglas Engelbart
Como comenté anteriormente, Douglas Engelbart y su equipo desarrollaron dos elementos sin los cuales, el ordenador hogareño (y hasta me atrevo a decir que la propia Internet) no serían tal como la conocemos en la actualidad. En primer lugar creo el llamativo mouse, un dispositivo pensado para interactuar con las gigantescas computadoras de aquellos años. Era un aparato construido en madera, con dos rueditas de metal y, en la ficha de patentamiento, se lo describe como “un indicador de coordenadas xy para un sistema de pantalla”.
En segundo lugar, con fondos provenientes de ARPA, sentó las bases para una interfaz gráfica desarrollando proyectos como pantallas mapeadas por bits, el hipertexto y otros elementos para el proyecto oN-Line System (NLS) el precursor de lo que hoy conocemos como Internet.
Muchas de las ideas revolucionarias de Engelbart no pudieron ser aplicadas (y tomadas en serio, vale decirlo) hasta bien avanzada la década de 1990. Finalmente, en diciembre del año 2000 el entonces presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, lo premió con la Medalla Nacional de Tecnología, el máximo reconocimiento al desarrollo tecnológico.
¿Por qué mouse?
Engelbart recordaba que llamar así al dispositivo que crearon fue un chiste entre su equipo, ya que el cable que salía de él parecía la cola de un ratón. La costumbre hizo que acabara llamándoselo de es amanera y no como “dispositivo de interfaz gráfica para el usuario".
¿Qué otro nombre le pondrías tú?