Cuando acosar mujeres es un espectáculo: cómo los medios hablan de Vitalii Sediuk
Luego de Gigi Hadid, es el turno de Kim Kardashian de ser acosada en plena calle por un desconocido.
El hombre, que se autodefine como bromista y reportero, intentó acercarse a la estrella mediática para, tal parece, besarle el trasero. Sin embargo, apenas se acercó a Kim Kardashian que uno de sus guardaespaldas lo echó al piso y lo retuvo.
Si bien, como te contamos en este artículo, lo sucedido con Gigi Hadid provocó consternación por la manera en que los medios describieron lo sucedido ("una broma" en lugar de un asalto), lo sucedido con Kardashian no parece haber provocado la misma reacción lamentable de parte de los medios. Aunque no se culpa de la violencia a Kardashian (como si sucedió con Hadid, a quien se tildó de exagerada por pegarle un codazo a su agresor), es interesante (y nada sorprendente) notar que los titulares mantienen un ligero tono jocoso.
El Mundo (España) titula lo sucedido de la siguiente manera "Un hombre asalta a Kim Kardashian para besarle el trasero". Bastante decente, ¿no? Qué pena que el primer vínculo que el diario pone a disposición de sus lectores sea el de un artículo en el que un "periodista" se regodea con la idea de que Kim Kardashian no habría usado sostén en más de seis días.
TMZ, parangón del buen gusto, dice que Kim fue "ass-aulted", haciendo un tremendamente ingenioso juego de palabras entre "ass", trasero, y "assaulted", acosada.
¿Será que nos divierte porque pensamos que acosar a una mujer no es algo tan grave?
¿Será que pensamos que, en el fondo, Kim se lo merece? ¿Acaso no aparece semi-desnuda en cada oportunidad que tiene? El acosador se abalanzó sobre ella para besar su trasero. Y la verdad es que ella ha hecho de su trasero su gran fuente de ingresos. Si ella se expone, eso nos da derecho a acceder a su cuerpo cuándo y cómo se nos da la gana, ¿no es verdad? Después de todo, su consentimiento no es importante.
Claro, Sediuk también ha atacado a celebridades masculinas. Ha tocado y puesto su rostro en los genitales de Bradley Cooper y Leonardo Di Caprio. Ha golpeado a Brad Pitt. Pero los artículos que tratan de estos sucesos tienden a emplear un tono menos jocoso, y se limitan a contar lo sucedido, sin necesidad de vincular a artículos que muestran todas las veces en que Bradley Cooper se ha sacado la camiseta o todas las escenas de películas en las que Brad Pitt aparece con poca ropa.
Cuando acosar mujeres es un espectáculo
Cuando hablamos de un acoso o agresión sexual sufrida por alguien (en el 2014, Seduik se deslizó bajo el vestido de America Ferrera y luego dijo que "no había podido ver nada") y lo vinculamos con la relación que la víctima tiene con su cuerpo ("Kim posa poca ropa, Gigi Hadid también"), estamos considerando que esta información es relevante al momento de hablar del acoso, casi como si una cosa tuviera que ver con la otra. Como si, en realidad, puesto que Kim Kardashian muestra tanto su cuerpo, el hecho de que alguien haya decidido tocarlo sin pedirle su permiso no es tan grave. Si Kim mostrara un poco menos su cuerpo, tal vez sí sería grave. Dicho de otro modo, lo que importa no es la acción del victimario, sino que quién es y cómo se comporta la víctima.
En el mundo, 1 mujer en 3 ha sido víctima de violencia física o sexual, generalmente por parte de alguien que conoce. En una encuesta llevada a cabo en el 2014 en los Estados Unidos, se determinó que el 65% de las mujeres habían experimentado algún tipo de acoso callejero. Un 23% habían sido tocadas sexualmente, un 20% habían sido perseguidas y un 9% habían sido obligadas a hacer algo sexual.
En su cuenta de Instagram, Sediuk tiene casi 17 mil seguidores. Sus comentarios tienen miles de likes y comentarios jocosos. Pero su influencia no es tan importante y es muy probable que Vitalii Sediuk nunca pase a la historia.
Lo que sí es importante es que los medios no le hagan la tarea y que, en lugar de ser cómplices de sus acciones, que hacen del acoso una cosa divertida, sean capaces de entender que sus titulares construyen mundos.