Un estudio científico realizado por investigadores italianos determinó que comer pasta no engorda, desmintiendo así la suposición de que estos alimentos a base de harina eran causantes de aumento de peso.
El informe, que obviamente fue muy bien recibido por todos los que amamos el consumo desmesurado de carbohidratos, fue publicado en la revista Nutrición y Diabetes y concluye además que el consumo de pasta está asociado con un menor índice de masa corporal.
Mmmhhh...
Sospechoso, ¿no es cierto? Bueno, resulta que al pie de la gacetilla que anuncia el supuesto hallazgo científico, aparece un nombre muy familiar para todos los amantes de la auténtica pasta italiana.

Es que Barilla, una de las principales marcas de pasta del mundo, es mencionada como parcial financista de la investigación. Pasándolo en limpio: una empresa cuyo modelo de negocios depende de vender alimentos a base de harina, apoya financieramente una investigación que dice que comer pasta no está vinculado con el sobrepeso.
¿Que coincidencia, no es cierto?
Si bien los autores del estudio aclararon que la marca italiana no tuvo participación en la metodología empleada para realizar el estudio, ni en el análisis e interpretación de los datos recoletados, es inevitable que la conexión entre la marca y el resultado de la investagación sea sospechosa.

Por otro lado, los investigadores no pudieron encontrar evidencia concluyente de que la pasta ayude a bajar de peso, sino que está < >. Sin embargo, este análisis es sesgado: la masa corporal depende de factores que van mucho más alla del consumo de pasta.
Es erróneo vincular el consumo de pastas con una buena figura, cuando la misma probablemente se atribuya a la dieta mediterránea que siguen la mayoría de los italianos (que fueron los sujetos de estudio), donde el consumo de carne es más reducido y los vegetales abundan en todas las comidas.
¿Era todo mentira entonces?
Bueno, a pesar de que el título del supuesto hallazgo es engañoso, no todo es mentira. La conclusión sería que comer pasta no engorda.. siempre y cuando sigas una dieta mediterránea y mantengas un estilo de vida similar al de los italianos, es decir: poca carne, muchas verduras y no más de 86 gramos de pasta por plato.
El mundo no para de decepcionarnos...