Científicos encuentran una posible cura para la esclerosis múltiple
La esclerosis múltiple es una enfermedad que afecta el sistema nervioso y por ende el cerebro y la médula espinal. Más específicamente, la enfermedad genera lesiones en la vaina de mielina, que es el material que rodea y protege a las células nerviosas.
Las consecuencias de la enfermedad son variadas, pero se caracteriza por la lentitud o bloqueo de las señales que envían las neuronas hacia el resto del cuerpo, y esto deriva en alteraciones de la vista, debilidad muscular, problemas de coordinación y equilibrio, problemas de memoria y pensamiento, entre otros.
Lo más aterrador de esta enfermedad es que no se conoce la causa y no existe cura alguna, y muchas veces aparece como una enfermedad autoinmune. En general se trata con medicinas y fisioterapia que ayudan a que los pacientes tengan mayor control sobre sus cuerpos y el avance de la enfermedad sea más lento.
Pero ahora, un equipo de científicos encontró un tratamiento que parecería reducir considerablemente el avance de la enfermedad y los síntomas.
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Ocrelizumab: una nueva esperanza
La droga ocrelizumab parece tener un gran efecto reductor de los ataques en pacientes con esclerosis múltiple remitente y evita la progresión de nuevos síntomas en la esclerosis múltiple progresiva y primaria.
El compuesto es un anticuerpo monoclonal anti-CD20 humanizado. Esto significa que tiene como target al marcador CD20, que es una proteína que se encuentra en la superficie de los linfocitos B. Como los linfocitos B son las células del sistema inmune, entonces esta droga actúa como un inmunosupresor y permite trata la enfermedad autoinmune.
Actualmente, la droga se encuentra aún en desarrollo por la multinacional suiza F. Hoffmann-La Roche AG, en vistas de obtener un tratamiento contra la esclerosis múltiple,
Un posible nuevo tratamiento para la EM
Un equipo de científicos realizó una serie de tres estudios para alcanzar estos resultados. A partir de los estudios concluyeron que el compuesto ocrelizumab actúa para aquellas personas con la enfermedad ya establecida como para aquellos que comienzan a desarrollarla.
El estudio fue realizado en personas que tienen la enfermedad y durante varias semanas se determinó su progresión tras la administración de la droga o de un placebo. Luego de 24 semanas, se confirmó una progresión muy retardada de los síntomas y de la enfermedad luego de administrar ocrelizumab.
Además, en los pacientes que recibieron el compuesto, las lesiones en el cerebro disminuyeron considerablemente.
Sin embargo, el compuesto debe aún pasar por varios estudios más para determinar su eficacia a largo plazo así como su seguridad. Esperemos que este tratamiento le permita a todas las personas que sufren de EM una vida normal, larga y saludable.
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