Apple, es una compañía conocida por crear productos como los iMac, MacBook, Macintosh, iPod, iPhone, iPad, etc, pero lo cierto es que hace tres décadas quiso intentar entrar al mundo de la moda.
Probablemente no lo sabías, pero en los años 80s Apple lanzó su propia línea de moda, con prendas que, al gusto de ahora, son bastante cuestionables estéticamente, pero que los fanboy y fangirls actuales usarían con gusto.
¿Acierto o fracaso?
Corría el año 1986 y, aparte de los desastres de Chernobyl y el Challenger, Apple presentó una completa línea de diseño de vestuario inspirada en sus productos y colorido logo de la época.
Con camisetas, sudaderas, shorts, gorras y buzos, entre otras prendas, la compañía intentó, al parecer sin éxito, que las personas que usaban sus productos en el escritorio también los llevaran puestos.
Se preguntarán cómo Steve Jobs, conocido por vestir siempre unos jeans y camiseta cuello de tortura negra permitió algo así. En 1985, el creador de Apple abandonó la empresa volviendo en 1997, así que no lo culpemos de tal atentado a la moda.
Dado que actualmente su línea de ropa no forma parte de la historia conocida de Apple, debemos asumir que fue un fracaso. Eso sí, los felicitamos por aprender y haber tomado ese estilo minimalista que tanto éxito les trajo en el siglo XXI.
El geek puede ser chic
Antes de quemar la ropa marca Apple y tratar de borrarla de nuestra cabeza, hay que reconocer que no todas las prendas eran feas. Las camisetas con el dibujo de la computadora trazada con líneas de colores, me parecen de lo más chic para el verdadero geek.
La línea infantil tampoco está mal; los pequeños siempre pueden arriesgarse más por la moda y, quién sabe, esos niños que por entonces tenían entre 3 y 6 años, probablemente se hicieron fanáticos de la manzana y, con orgullo, indican que llevaban a Apple en el cuerpo desde temprana edad.
Los shorts y sudaderas no corren con la misma suerte; exceso de colores, letras muy grandes y logos que cansan la vista, pero hay que considerar que la moda ochentera era diferente y, lo que hoy nos parece un atentado al estilo, era lo que se usaba hace 28 años.
En conclusión: Geek y chic pueden ir de la mano, pero siempre de forma cuidada, ya que el entusiasmo de los geeks por sus gadgets empresas tecnológicas preferidas puede jugarles una mala pasada y, por el otro lado, por buscar estar a la moda, podemos perdernos maravillas tecnológicas.
¿Conocías esta línea de ropa Apple?¿Qué te parece?