Así funciona el nuevo e increíble brazo biónico de Phantom Limb
Como vimos en el artíuclo « Esta prótesis es el sueño de todo gamer, ¡inspirada en Metal Gear!», un ávido gamer británico acaba de recibir un brazo biónico que lo transforma en un verdadero Cyborg.
Inspirado en un personaje de videojuegos, no solo funciona perfectamente, sino que además incorpora puertos USB, reloj inteligente, rayos láser y hasta un dron que puede lanzar a volar cuando quiera, pero más allá de su espectacularidad, lo mejor está en su interesante tecnología que demuestra lo lejos que llegó la industria de las prótesis robóticas en los últimos años y en la que al parecer los límites son infinitos.
¿Cómo funciona este increíble brazo biónico?
James Young es el feliz receptor del primer brazo biónico del proyecto Phantom Limb. Se trata de una prótesis robótica que el controla mediante sensores conectados a los músculos de su hombro.
Young perdió su brazo izquierdo en un accidente de tren hace cuatro años, pero los músculos de su hombro quedaron intactos, lo que permite que el cerebro envíe señales de movimiento que son interpretados por esta prótesis robótica y se traducen en funciones.
Desarrollado por la empresa Open Bionics, la más importante en su tipo vio en esta prótesis todo un desafío sobre todo a la hora de entregar precisión a los movimientos de sus dedos. Para ello crearon un tipo de sensores especiales y nuevas técnicas para interpretar las señales musculares, lo que conlleva un trabajo que une la biotecnología con la ingeniería y el diseño robótico.
Otro gran desafío fue dar con la apariencia tan especial que se buscaba, por lo que los componentes debían tener una forma muy específica y cada uno de ellos fue impreso en 3D.
Hoy el brazo biónico es capaz de abrir y cerrar el puño, mover el dedo pulgar de forma independiente, apuntar con los otros dedos, tomar objetos pequeños «pinchándolos» con los dedos e incluso servir como un trípode según las necesidades de James Young.
Aprendiendo a usar el brazo
Más allá de la espectacularidad de los gadgets que este brazo biónico incorpora, lo más importante era que su joven receptor aprendiera a utilizarlo entrenando su musculatura y cerebro, lo que no es nada fácil. Sus luchas y avances fueron capturadas para un documental de la BBC llamado Bodyhack: Metal Gear.
El brazo se controla de forma mioeléctrica y los sensores reconocen diferentes patrones de movimiento que el usuario realiza al tensar su hombro de forma específica. Estos sensores están conectados con cables a una unidad procesadora que se esconde bajo la ropa y donde además está su batería la cual es recargable.
James Young, que además de gamer es un científico experto en biología, lleva más de un año preparándose para poder utilizar su brazo biónico a la vez que el equipo del proyecto Phantom Limb realiza retoques no solo funcionales sino que también estéticos.
Un brazo envidiable y no lo decimos solo por sus funciones que convierten a su usuario en un cyborg sino que también por la tecnología que esconde y el avance que significa para las prótesis robóticas permitiendo que personas amputadas vuelvan a tener una existencia relativamente normal y quién sabe, quizá en un par de años más sean aún más poderosas que los miembros que nos dio la naturaleza.
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