¡Por fin! Después de varias entrevistas, pruebas, psicométricos y entrega de papeles te dijeron que obtuviste el empleo. ¡Felicidades! Ahora… ¿sabes qué debes preguntar antes de firmar tu contrato?
Te dejamos esta información para que no se te pase ningún detalle:
#5 El modelo de contratación y cotización
Pregunta cómo te van a contratar, si por obra, de manera indefinida o por cierto tiempo. De eso dependerá también si deben indemnizarte en caso de que te despidan o no.
Algunas empresas hacen que cotices con un sueldo menor al que realmente te pagan, sustituyendo la diferencia a través de bonos. Asegúrate de que el salario que recibirás será el mismo con el que estarás dado de alta ante las autoridades de hacienda.
#4 Tu sueldo exacto y prestaciones
La empresa te ofrece un sueldo, pero algunas veces no te especifican como será pagado este sueldo: si semanal, quincenal o por mes, o si te darán vales de despensa, fondo de ahorro, seguro de gastos médicos, o alguna otra prestación. Solicita que te hagan un ejemplo donde especifiquen las deducciones, por ejemplo cuánto de impuestos de descuentan. Con eso tendrás una idea clara del dinero con el que contarás cada día de pago.
#3 Tus funciones y horario especificos
Si en algún punto de la inducción te dicen que una de tus tareas es apoyar a otra área de la empresa, pide que sean más específicos. No quiere decir que no estés abierta a realizar actividades en equipo, pero tener un listado de cada una de tus responsabilidades te protegerá en lo que te acoplas a tu nuevo empleo.
Aunque suene demasiado básico, es importante que te estipulen tus horarios y tus días de trabajo, ya que necesitas organizar tu tiempo, para combinar tu nuevo empleo con tu vida social o familiar. Además, hay algunas empresas que te pedirán quedarte más tiempo, por lo que tienes que averiguar si hay algún pago por horas extras.
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#2 El objetivo de tu puesto y el de la empresa
Es necesario que conozcas hacia donde está caminando esa empresa y de qué forma está relacionado tu puesto a ese objetivo general. Desde el principio pide que te definen metas, para saber si estás avanzando. Con eso también sabrás qué puedes aportar para mejorar.
#1 ¿A quién debes reportar?
Conoce las jerarquías de la empresa: quién es tu jefe directo y si hay alguien más que pueda darte órdenes o pedirte tareas. Cuando llegas a un lugar nuevo, es normal que no sepamos específicamente con quién dirigirnos o a quién hacerle caso; así que si tienes esta información desde el inicio te ahorrarás malentendidos.
Mucha suerte en tu nuevo empleo. Recuerda: que no te de pena preguntar todo lo necesario, querer estar informada dará una imagen más profesional de ti.
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